A pesar de que cada año 630 mil adolescentes se suman al rezago educativo al abandonar las aulas de secundaria, y de que el número de mexicanos que no han concluido su educación básica es de casi 32 millones de personas mayores de 15 años, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) aplicó un recorte presupuestal de 190 millones de pesos a los recursos federales destinados al Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) en 2011, aseguró Juan de Dios Castro, director general del organismo.

Al presentar un informe de resultados, a 30 años de la creación del INEA, informó que el rezago educativo también afecta a servidores públicos de los tres niveles de gobierno, pues al menos 18 mil no han concluido su educación básica. Entre ellos se incluye, afirmó, a cerca de 160 funcionarios analfabetos, tres de ellos presidentes municipales en localidades oaxaqueñas.

Subrayó que es muy importante que las cabezas de los niveles de gobierno no estén en rezago educativo, porque cómo vamos a esperar que los policias que nos cuidan tengan primaria, si el alcalde es analfabeto, por lo que demandó a los gobiernos estatales y municipales incrementar su participación en los programas de alfabetización y atención al rezago educativo.

Castro explicó que las dependencias federales más grandes, como la Comisión Federal de Electricidad y Petroleos Mexicanos, enfrentan mayores condiciones de rezago educativo entre sus trabajadores, incluido el analfabetismo, pues tienen más personal de seguridad, limpieza y veladores.

Ante la necesidad de incrementar los recursos públicos que se destinan para abatir el rezago educativo, subrayó que al menos 15 entidades no ponen un solo peso para atender a la población que no sabe leer ni escribir o que no ha terminado su primaria o secundaria.

En cuanto a la merma de los fondos federales, indicó que la decisión de la SHCP prácticamente equivale a recortar lo que nos está aumentando la Cámara de Diputados para el ejercicio fiscal del año próximo, con 2 mil 300 millones de pesos, en comparación con los 2 mil 100 millones aprobados para este año, antes del recorte.

En estas condiciones de financiamiento, reconoció, no podemos avanzar tan rápido como necesitamos, pues enfatizó que el rezago educativo en secundaria no ha dejado de crecer desde 1970, y hoy alcanza a 16.4 millones de mexicanos.

Al presentar los resultados del INEA, aseguró que en la primera década de este siglo se logró reducir en 600 mil el número de analfabetos, cifrá nunca alcanzada en México, aunque cabe resaltar que de 1980 a 2010, es decir, en 30 años, 1.1 millones de mexicanos mayores de 15 años lograron aprender a leer y escribir.

En cuanto a las metas alcanzadas para abatir el rezago educativo de quienes no han concluido su primaria, indicó que de 2000 a 2010 se redujo de 11.7 a 10.1 millones de personas mayores de 15 años que no han concluido este nivel estudios, aunque señaló que en 1980, década en que fue creado el INEA, la cifra era de 9.4 millones.

Castro reconoció que pese a que México podrá alcanzar en 2016 el estatuto de país libre de analfabetismo, al lograr que menos de 4 por ciento de su población hispanohablante se encuentre en esta situación, no será así para la población indígena, donde se estima que 17 por ciento de esas personas de 15 a 17 años no sabe leer ni escribir, y 56 por ciento de las que tienen entre 60 y 74 años.

Afirmó que uno de los obstáculos son los patrones culturales de las comunidades indígenas, donde la mujer pide permiso a su esposo para poder estudiar, además de las 364 variantes dialectales que existen en el país. Con estas condiciones, y si no hay más presupuesto, el INEA no puede hacer más.