Integrantes de organizaciones ambientalistas se congratularon por la futura comparecencia del titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo –a la luz de la reforma sobre derechos humanos–, por su negativa a cumplir con la recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en torno a los damnificados en Tabasco.

Nos da gusto que se esté abordando desde el enfoque de derechos humanos la ineficiencia de las políticas públicas relacionadas con el agua, dijo Hilda Salazar, de la Coalición de Organizaciones Mexicanas por el Derecho al Agua.

Dijo que se abre la puerta a la posibilidad de llamar a un funcionario a cuentas, no sólo desde la perspectiva de dar cumplimiento al programa hídrico sino de la afectación a derechos humanos.

Lo que esperamos es que, ya que el Senado los convoca desde esta perspectiva de derechos humanos, la respuesta sea diferente a lo que ha sido en el pasado; esperamos que el Senado obligue a quien le corresponde, en este caso a Conagua, a dar una respuesta desde la óptica de derechos humanos que implicaría acciones distintas a las que han venido realizando, es decir, una política de manejo integral del agua, abundó.

Confió en que la Cámara de Senadores no acepte la respuesta de siempre: que se trata de un problema de recursos cuando es un problema de enfoque y de política pública.

Por separado, Andrea Cerami, del Centro Mexicano de Derecho Ambiental, consideró afortunado que la CNDH tenga la posibilidad de llamar a comparecer ante el Congreso a autoridades que no acepten sus recomendaciones.