A causa de la inseguridad e ilícitos cometidos por la delincuencia organizada, el sector farmacéutico reportó pérdidas por 430 millones de pesos en el último año, aseguró Antonio Pascual Feria, presidente de la Asociación Nacional de Farmacias de México (Anafarmex).

Señaló que aunque en un nivel moderado, las farmacias son víctimas de extorsiones, sobre todo en las entidades más afectadas por la violencia, pero también hay casos en el Distrito Federal.

En conferencia de prensa, dijo que el sector también resulta afectado por el mercado ilegal de medicinas: en tianguis y comercios informales se venden los fármacos robados, piratas, adulterados e incluso los caducos.

Señaló que el monto obtenido por esta vía representa 10 por ciento del mercado formal, es decir, mil 100 millones de dólares anuales.

Al hacer un balance anual, resaltó la importancia de emprender acciones para hacer frente a los delincuentes, como en la capital del país, donde a partir de noviembre entró en vigor un protocolo para que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) atienda de manera específica el robo de medicinas y su comercio ilícito. Medidas de este tipo se extenderán al resto de las entidades federativas, señaló.

Al desglosar las cifras de las pérdidas por robos, el presidente de Anafarmex explicó que las farmacias sufren al menos un asalto al año en promedio, lo cual para los 24 establecimientos que existen en el país, representa una pérdida de 120 millones de pesos.

A escala nacional hay 60 distribuidores que entre 2010 y 2011 reportaron 132 robos a sus unidades de transporte, en los que perdieron 130 millones de pesos. En tanto, los 200 fabricantes instalados en el país denunciaron 36 asaltos por un monto de 180 millones de pesos.