Boca del Río, Ver., 18 de diciembre. Enrique Peña Nieto arrancó su precampaña con miras a la Presidencia de la República, y en su mensaje afirmó: La sociedad mexicana está urgida de un cambio, un cambio con rumbo cierto, que lleve a México a construir su grandeza, y éste lo representa, dijo, su partido, el Revolucionario Institucional (PRI).

El precandidato priísta tomó protesta a 212 presidentes de otros tantos comités municipales; a 4 mil 808 representantes de comités seccionales y a los 2 mil 43 comisionados de su partido en un acto con el sello jarocho –batucadas, ramas sotaventinas y una orquesta juvenil escolar– en uno de los salones del Word Trade Center, con capacidad para más de 5 mil personas.

Peña Nieto fue el último orador –después del dirigente estatal Héctor Yunes; Samira Posadas en nombre de los seccionales; el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, y el dirigente nacional priísta, Pedro Joaquín Coldwell– y varias veces tuvo que pedir permítanme compartirles estas reflexiones para acallar los gritos de la militancia de su partido, que le impedían continuar.

Ante el presídum, donde además estaba Beatriz Paredes Rangel, el político mexiquense anunció que el mensaje con el cual iniciará campaña el 30 de marzo será que México está urgido de un cambio y que éste será clave para presentarle a la sociedad propuestas, soluciones, pero sobre todo, el compromiso de que quien les habla asumirá para ganar su confianza, para llegar y cumplir desde la Presidencia de la República.

Reiteró que si bien la campaña “formalmente aún no ha iniciado, los ataques de los adversarios están a la orden del día. Y más que ocupados por ver qué plantean a México están dedicados a hacer ataque, constante y permanente a quien tanto temor le tienen, a quien tanto les preocupa, al mejor partido de México: al Partido Revolucionario Institucional.

Hoy el PRI tiene memoria y sabe lo que no se ha logrado en la última década. Hoy el PRI reconoce y no duda que hoy en México vemos más gente en condición de pobreza; hoy el PRI no olvida que en la última década no se han generado el crecimiento económico, los empleos que la población demanda.

El partido al que pertenecen, les dijo a sus simpatizantes, está hoy en la mayor preferencia de los mexicanos; esto, aseguró, por los resultados de buen gobierno, la buena gestión pública que los representantes de mi partido tienen en las distintas trincheras y en distintas responsabilidades.

Prevista para iniciar a las 11:30 horas, la reunión priísta comenzó pasadas las 12 y se caracterizó por la brevedad de los discursos de los oradores.

En su turno, el gobernador de Veracruz exaltó a los gobiernos priístas que perviven en México. Dijo Duarte de Ochoa que están preparados para el debate; pero estamos convencidos que la injuria no es el camino.

Antes, Peña Nieto sostuvo una reunión privada con directivos y dueños de una treintena de medios locales de información en la que fue casa del ex presidente Adolfo Ruiz Cortines. Notiver, el matutino más leído de la entidad y al que le han matado al menos dos reporteros y un fotógrafo en fechas recientes, no envió representante.

Después de la toma formal de protesta a los nuevos directivos, Peña Nieto recorrió el entarimado, y abrió los brazos y lanzaba besos a la multitud: las camisetas rojas que le arrojaban sus correligionarias, las recogía, las besaba y las devolvía a la masa.

Tardó más de 20 minutos en abandonar el salón del WTC, por la salutación a la militancia: poco más del tiempo que ocupó para ingresar y terminar su discurso.