Prevén turbulencia financiera en 2012 por la crisis de deuda
Sábado 24 de diciembre de 2011, p. 23
París, 23 de diciembre. El mercado de obligaciones en Europa, sometido en 2011 a violentas turbulencias debido a la crisis de la deuda que afecta a toda la zona euro, se apresta a ingresar en un 2012 lleno de tensiones, con el riesgo de una implosión de la unión monetaria.
“En 2011 se puede hablar de krach (derrumbe) de las obligaciones, ya que las tasas de algunos países europeos se dispararon y el mercado perdió la brújula: los fundamentos económicos y los Estados ya no son la referencia”, opina Charles Bouffier, director general delegado de la sociedad de gestión de activos Egamo.
La crisis de deuda, inicialmente centrada en Grecia e Irlanda en 2010, se propagó este año como un reguero de pólvora. Primero, Portugal debió recurrir a una ayuda del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la Unión Europea (UE) de 78 mil millones de euros a cambio de un draconiano programa de austeridad.
Italia y España, tercera y cuarta economía de la zona euro, padecieron los embates del mercado, que provocaron la caída del primer ministro italiano Silvio Berlusconi, y la derrota electoral del gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero.
Sólo la acción del Banco Central Europeo (BCE), que compró deuda de estos dos países en el mercado secundario (donde se negocian títulos ya emitidos) permitió calmar algo las tensiones.
En un fenómeno impensable hace un año, el propio corazón de la zona euro, Alemania y Francia, fue sacudido por la tormenta, la agencia de calificación Standard and Poor’s contempla retirarles próximamente su apreciada nota AAA, la mejor posible, que le permite tomar prestado a tasas muy atractivas.
Esa rebaja ya le ocurrió a Estados Unidos en agosto, aunque no tuvo impacto en los tipos de interés pagados por el país, que están en mínimos históricos.
Según Jean-François Robin, analista de Natixis, aunque el mercado de obligaciones europeo vivió una cierta calma durante las últimas semanas de este año, 2012 se anuncia lleno de tensiones.
El problema se va a plantear si las tasas suben cuando ciertos Estados intenten acceder al mercado
para financiarse, subraya.
Serán particularmente vigiladas las operaciones para captar financiación a largo plazo de Alemania, pero también de Francia, Italia o España.