Creciente auge global de esa modalidad educativa; hay más de un millón en Brasil
Se prevé que en 2025 la cuarta parte de 160 millones de universitarios utilizarán ese sistema
Martes 27 de diciembre de 2011, p. 30
En un contexto internacional en que la educación en línea se ha convertido en una opción para miles de jóvenes –tan sólo para 2025 se prevé que de los 160 millones de universitarios en el mundo, 40 millones estudiarán con este modelo– en México, la matrícula no escolarizada apenas llega a 355 mil estudiantes, lo que significa 9.7 por ciento de total de los alumnos en este nivel educativo.
De acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP), la matrícula no escolarizada casi se duplicó en los pasados cinco años, al pasar de 180 mil a 355 mil inscritos en el país.
Sin embargo, en Brasil, menos de mil 500 personas estudiaban en el sistema no presencial en 2000 y, hoy día, la cifra asciende a más de un millón de personas que cursan estudios profesionales en esta modalidad.
En Estados Unidos, 49 por ciento de los estudiantes de educación superior tomó uno o más cursos en línea durante 2010. Se estima que dicha proporción aumentará a 88 por ciento en 2015.
Normatividad, uno de los retos
Aunque representa una opción para miles de jóvenes que buscan ingresar en la enseñanza superior, el sistema aún no ha logrado captar la matrícula suficiente y, por otro lado, señala la SEP, enfrenta importantes desafíos
.
Entre esos retos está la falta de normas que regulen su operación, los niveles diferenciados de calidad y una casi nula vinculación
con el sistema presencial.
A la par de la multiplicación de los programas de formación y capacitación, los docentes del sistema abierto y a distancia deben recibir el reconocimiento profesional a su desempeño, indica la dependencia.
Otro reto estriba en que la rápida obsolescencia tecnológica obligará al desembolso de cuantiosas inversiones en infraestructura y equipamiento. Por lo que una efectiva política de alianzas
entre las instituciones educativas podría contribuir a reducir el impacto de esos requerimientos.
Ante ello, la SEP reconoce que es necesario reforzar el paso y multiplicar los esfuerzos para garantizar que esta modalidad se integre plenamente
a la cultura de la evaluación y la mejora continua de la calidad.
Del mismo modo, enfatiza, se requiere avanzar en la confección de mecanismos regulatorios, suficientes y adecuados, que den certeza y viabilidad a esta modalidad y regulen su desarrollo.
En el país, los principales proyectos que estructuran la educación a distancia son el Espacio Común de la Educación Superior Abierta y a Distancia, encabezado por la Universidad Nacional Autónoma de México, así como el Sistema Nacional de Educación a Distancia, impulsado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, y el Programa de Educación Superior Abierta y a Distancia (ESAD), creado por la SEP hace dos años.
Actualmente, el ESAD atiende a 46 mil jóvenes, aunque la secretaría estima que para 2012 su matrícula podría ascender a más de 80 mil alumnos.
Asimismo, se pretende impulsar la integración de los Sistemas Estatales de Educación Abierta y a Distancia.