La Paz, BCS, 30 de diciembre. El secretario estatal de Seguridad Pública, Álvaro de la Peña Angulo, se manifestó contra el proceso de certificación de Los Cabos como municipio seguro, debido a que nadie puede garantizar la seguridad total de un lugar en ninguna parte del mundo, dijo.

La propuesta del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal es una campaña de mercadotecnia, con buena intención, pero no se puede sostener, porque en cualquier momento pueden ocurrir hechos violentos como el de hace unas semanas, en Cabo San Lucas, entre marinos y policías ministeriales que se enfrentaron contra delincuentes armados, lo cual dejó un marino y un delincuente muertos y tres policías ministeriales heridos, agregó.

Imagine si avalamos una certificación de ese tipo y al día siguientes se dan hechos así, seríamos incongruentes, expresó.

La mejor certificación de seguridad con propósitos turísticos es la percepción que se llevan los viajeros a sus lugares de origen, no la que otorgan consultoras u organizaciones no gubernamentales que además cobran por hacerlo.

De ese modo, dijo, caeríamos en una situación de falsedad de la autoridad por querer hacer algo que no existe, explicó.

Dijo que en el gobierno no existen certificaciones de seguridad para estados o municipios, aunque sí la hay para cuerpos policiacos que es hacia donde están encaminados los esfuerzos de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública.

Explicó que en 2011 se integró la Policía Estatal Acreditable con 210 elementos que están en proceso de capacitación en la Academia Estatal de Policía y campos militares de otras partes del país para que entre en funciones en mayo del próximo año, alineada con la policía federal.

Puntualizó que una cosa es la certificación de elementos policiacos con base en exámenes de confianza y capacitación y otra la de un municipio complejo.

El funcionario consideró de hecho que aunque Baja California Sur es una de las tres más seguras del país, según el Sistema Nacional de Seguridad Pública Cabo San Lucas es foco rojo, punto vulnerable para la delincuencia por su condición multicultural.

El desarrollo turístico ha atraído a muchas personas de otros lugares del país, así como a extranjeros, por lo que esa mezcla ha desvirtuado la cultura local y se han perdido valores.

Señaló que en Los Cabos las exigencias del turismo han alentado la venta de drogas y la trata de personas, por lo que son temas que se deben atacar por parte de las corporaciones policiacas con el apoyo de las fuerzas armadas para que la situación no se deteriore más.

Mencionó en 2012 se cambiará la estrategia para vigilar todas las puertas de entrada y salida al estado, con un criterio más profesional.