El Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos (Opddh), programa conjunto de la Organización Mundial Contra la Tortura y de la Federación Internacional de Derechos Humanos deploró los nulos avances de las indagatorias del gobierno con respecto a la desaparición forzada de los activistas Marcial Bautista y Eva Alarcón.

Por tal motivo, llamó a las autoridades a acelerar la búsqueda de los defensores de las garantías básicas, proteger a sus compañeros y familiares, y realizar una investigación exhaustiva e imparcial sobre el caso.

De acuerdo con información dada a conocer por el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, el Opddh señaló que las procuradurías General de la República (PGR) y General de Justicia del Estado de Guerrero (PGJG) no han realizado con efectividad las pesquisas que lleven a esclarecer la desaparición de ambos militantes de la Organización de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán.

Bautisa y Alarcón, recordó, fueron obligados por un grupo de hombres armados a descender del autobús en el que viajaban del municipio de Petatlán rumbo a la ciudad de México, a donde acudirían para participar en una reunión con el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, del cual también son miembros. Desde entonces se desconoce su paradero.

Ante la falta de avance en las indagatorias, el organismo manifestó su preocupación por la seguridad e integridad física de los activistas, y urgió a las autoridades del país a tomar las medidas apropiadas para dar con su paradero, así como para garantizar la seguridad de todos los miembros de sus familias y compañeros.

Además exigió realizar una investigación independiente, inmediata, exhaustiva e imparcial sobre el caso, para identificar y castigar a los responsables del delito; poner fin a todo tipo de hostigamiento en contra de los defensores de garantías fundamentales en México, y respetar los términos de la Declaración sobre los Defensores de los Derechos Humanos, aprobada por Naciones Unidas en 1998.

Coral Rojas, hija de Eva Alarcón, señaló en entrevista con La Jornada que va muchísimo tiempo desde que empezó la investigación en la Procuraduría General de la República (PGR) y no han adoptado ninguna medida para rescatar a mi madre y a Marcial. Se tardaron mucho y ya hubieran podido ubicar el lugar.

Por tal motivo, exigió que se averigüe a profundidad qué papel tuvieron los policías ministeriales que estuvieron implicados en el secuestro de los dos militantes –ya que hasta hoy sólo hay uno arraigado– y llamó a las procuradurías a corregir cuanto antes una actuación que calificó de insatisfactoria.