Venimos a hacerle daño a los Cementeros, queremos jugarles un buen partido y llevarnos los tres puntos, anotó Efraín Flores, técnico del Pachuca, a su llegada a esta ciudad y de cara al cotejo de este sábado en el estadio Azul.

Flores agregó: No tenemos miedo, sólo respeto a La Máquina. Los Tuzos tampoco temen ser afectados por un mal arbitraje, a pesar del arranque negativo de los silbantes en la presente campaña, y tampoco hay preocupación por la afición celeste que hace 15 días agredió con un botellazo en la cabeza al defensa Carlos Salcido, de Tigres.

“Me preocupo por mi equipo; los aspectos arbitrales son parte del futbol y así como jugadores y entrenadores podemos cometer errores, ellos también.

Yo les digo a los muchachos que debemos hacer nuestro trabajo lo mejor posible y dejar que ellos hagan el suyo. Es un tema en el que ni siquiera debemos pensar, indicó.

Sobre la agresividad descontrolada de algunos seudoaficionados, mencionó que en nuestro México cada vez hay más cosas positivas que negativas y aquellos son hechos aislados.

Pachuca llegó a un hotel de Polanco y el entrenador se detuvo unos instantes para expresar ante la prensa que el choque ante Cruz Azul es un termómetro importante para ver cómo vamos creciendo. Espero un partido complicado, pero los Tuzos están construidos para las adversidades.

Dijo contar con un gran plantel, pero admitió que siempre es mejor arrancar con todos y no con dos bajas, en alusión a los lesionados Enrique Esqueda y Guillermo Franco, quien frenó su integración al plantel, pues apenas tenía dos o tres días cuando le dio apendicitis y tras ser operado retomó el trabajo hace un par de días, pero se prepara por separado.

En cuanto al Paleta Esqueda, dijo que ya recibió el alta médica, pero futbolísticamente no está al ciento por ciento, aunque hizo el viaje (a la capital)... Franco va para otras tres semanas. Calculo que por la fecha seis o siete tendré plantel completo... Todo eso afecta. Sin embargo, tengo un gran equipo y confío en todos.

Respecto de Marco Bueno, campeón del mundo Sub-17 y autor de dos goles frente al Puebla, explicó que lo tiene en el primer equipo, pero, al igual que todos los chiquitos, lleva su proceso y hay que respetarlo. Tengo muchísimos años llevando jóvenes a primera división, algo que se hace poco a poco.

Por último, se refirió al rival: “Cruz Azul es un excelente equipo, juega bien y es difícil en su casa; tiene buena defensa, gran ataque y magníficos jugadores.

Hay que tenerle respeto, no temor. Nosotros estamos seguros y confiados en nuestro trabajo. Pachuca cada vez alcanzará su mejor rendimiento y los partidos nos irán dando ese crecimiento.