Madrid, 20 de enero. Amnistía Internacional (AI) calificó hoy de escandaloso el juicio a Baltasar Garzón que arrancará el martes en el Tribunal Supremo español por la investigación del magistrado de los crímenes del franquismo.

AI considera escandaloso que un magistrado sea juzgado por buscar la justicia, la verdad y la reparación para las víctimas y los familiares de una violación masiva de derechos humanos, señaló.

La investigación de los abusos contra los derechos humanos es una obligación de derecho internacional para el Estado español, incluyendo el Poder Judicial en su conjunto, añadió.

Garzón, de 56 años y suspendido desde hace casi dos como juez de la Audiencia Nacional española, ha sido juzgado esta semana por las escuchas que ordenó en el contexto del caso Gürtel, la trama de corrupción que salpica al Partido Popular de Mariano Rajoy desde hace tres años, y se encuentra a la espera del veredicto.

En el juicio que arranca el martes, proceso que ha comprometido la imagen de la justicia española fuera de España, está acusado de haber prevaricado cuando abrió su investigación de las desapariciones durante la guerra civil (1936-1939) y la posterior dictadura de Francisco Franco (1939-1975).

Garzón acusó al dictador y a 44 ex altos funcionarios de su régimen, todos ya muertos, de crímenes de lesa humanidad. La causa acabó diluyéndose al tener que inhibirse en favor de los juzgados territoriales, obligado por la fiscalía.

Venganza ultraderechista

La acusación en este proceso, impulsado por organizaciones de ultraderecha, le atribuye haber ignorado la ley de amnistía de 1977 cuando en 2008 se declaró competente para investigar la desaparición de más de 100 mil personas.

Jamás puede considerarse delito la investigación de violaciones de derechos humanos, aun si para ello es necesario dejar de lado una ley de amnistía u otras normas relativas a prescripción de los delitos, señaló AI al respecto.

La organización de defensa de los derechos humanos urgió a las autoridades españolas a centrar sus esfuerzos en revelar la verdad de las miles de desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y actos de tortura cometidos durante el franquismo y en proporcionar reparación plena a las víctimas y a sus familias.

Los procesos a Garzón han sido interpretados por la izquierda como un intento de apartar de la judicatura a un juez progresista que se ha granjeado enemigos a lo largo de su carrera al atreverse con casos que otros compañeros no quisieron abordar y por su gusto por la notoriedad mediática.