En la decisión inédita de acudir en coalición total a las elecciones federales y a las 15 locales concurrentes del próximo primero de julio, PRD, PT y Movimiento Ciudadano (MC), junto con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), enfrentan fuertes tensiones internas por la elección de los candidatos de las fuerzas de izquierda.

Con el tiempo encima para el registro ante el Instituto Federal Electoral (IFE) y en medio de jaloneos de los precandidatos, los partidos han avanzado lento, pero con paso firme. La candidatura al gobierno de Tabasco, en manos de Arturo Nuñez, y de la jefatura de Gobierno del Distrito Federal, con Miguel Ángel Mancera, son los primeros resultados.

Sin embargo, todavía queda un largo camino para decidir a los abanderados de los partidos y movimientos de izquierda a los gobiernos de Morelos, Chiapas, Jalisco, Guanajuato y Yucatán.

Para Manuel Camacho, quien hasta ahora coordina las negociaciones entre los tres partidos y Morena, la forma tan civilizada y de alta mira de objetivos e intereses nacionales con la que Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard resolvieron la candidatura presidencial, ha sido fundamental para avanzar en las tareas siguientes.

Los asuntos pendientes son muchos. El camino todavía es muy largo y fácil no será, dice la secretaria general del PRD, Dolores Padierna, quien sigue las negociaciones.

Como nunca antes, a los comicios federales de este 2012 se suman otros 15 procesos locales concurrentes. En todos, PRD, PT, MC y Morena, trabajan para postular candidatos únicos.

Pero la lista es larga. Están en juego la Presidencia de la República, las 500 curules en la Cámara de Diputados, 128 escaños en el Senado, 247 diputaciones locales de mayoría relativa, otras 232 de representación proporcional, y 887 municipios y jefaturas delegaciones, según la numeralia del IFE. Campeche, Colima, Guerrero, México, Nuevo León, Querétaro, San Luis Potosí y Sonora completan la lista de los estados que renuevan Congreso local y ayuntamientos.

En el diagnóstico del PRD para los estados que renuevan gubernatura, en Morelos hay posibilidades reales de triunfo, si consiguen candidatos en unidad. Hoy están en abierta precampaña, y en caso de que los precandidatos no lleguen a un acuerdo político en los próximos días, el 4 y 5 de febrero se levantará una encuesta que defina al candidato.

En el caso de Chiapas, aunque se tiene un voto perredista muy fuerte, existen complicaciones internas generadas por el gobernador Juan Sabines. Pero ninguna de las decisiones se tomó sin el consentimiento del mandatario estatal.

Ahí, la senadora María Elena Orantes –quien apenas hace una semana renunció al PRI– fue incluida en la encuesta de los partidos de izquierda que definirá al candidato al gobierno del estado, con una alta probabilidad de que gane.

En Jalisco, también con complicaciones en el PRD, apunta a una solución, donde Enrique Alfaro se presenta como el precandidato mejor evaluado hasta ahora.

Dolores Padierna reconoce que las comicios en Guanajuato y Yucatán son muy difíciles para los partidos de izquierda, pues históricamente no han tenido presencia.

Para el caso del DF, insiste en que la elección de Mancera es sólo una parte de la tarea. Hoy es necesario trabajar en los candidatos a jefes delegacionales y diputados locales, pero dejando atrás prácticas como la de quita-pon, donde el delegado en turno se siente con derecho a elegir sucesor.

Es un camino largo, difícil, pero estamos conscientes que tenemos una posibilidad real de ganar la Presidencia, dice Padierna.