Miércoles 25 de enero de 2012, p. 9
Los Ángeles, 24 de enero. Antonio Villaraigosa, alcalde de Los Ángeles, firmó este martes la ley que ordena a los actores pornográficos a usar condones, medida que fue bien recibida por los activistas que luchan para reducir las infecciones de sida.
Los legisladores de la ciudad californiana votaron en favor de la ley a principios de enero, en lo que fue una victoria de los activistas contra el sida en la batalla contra la multimillonaria industria estadunidense de cine pornográfico, que tiene su radio de acción básicamente en California.
En particular, la medida obliga a las productoras a pagar una tarifa que permita cubrir los costos de las inspecciones de los sets de filmación.
La Fundación para la Atención Médica del Sida (AMS), que desde hace tiempo ha hecho campaña en favor del uso de condones en los sets, reunió suficientes firmas para forzar a los legisladores a aprobar la ordenanza o de lo contrario tendrían que haber organizado un costoso plebiscito.
Asunto de salud pública
Michael Weinstein, presidente de la AMS, felicitó al alcalde Villaraigosa por haber dado el paso final para convertir el texto en ley y dijo que “éste es un gran día para Los Ángeles, para los actores y para el sexo seguro.
Si se le quita todo el griterío y el drama (de la industria del porno), se observa que es un asunto de salud pública
, dijo. Agregó que no sabía de ninguna otra ciudad en Estados Unidos con una ordenanza similar.
Sin embargo, Nina Hartley, enfermera registrada y actriz porno desde 1984, arremetió contra la decisión.
Dijo que para realizar una toma en una película porno es necesario mantener relaciones sexuales que duren entre 30 y 60 minutos, y que usar un condón por tanto tiempo puede causar irritaciones que derivan en mayor riesgo de contraer enfermedades venéreas.