En el pueblo de Xoco volvieron a tañer las campanas. Ante el intento de reiniciar los trabajos de lo que será Ciudad Progresiva, en Mayorazgo 130, habitantes impidieron el reinicio de las obras. En respuesta, representantes de la empresa Ideurban amagaron con responsabilizarlos de los posibles daños a los inmuebles aledaños y a la iglesia.

El miércoles por la noche, el repicar del campanario movilizó a los vecinos del pueblo, que como en tiempos ancestrales salieron al llamado en defensa de la comunidad. Los trabajadores de las empresas contratadas por Ideurban para la construcción del proyecto empezaron a laborar; según se dijo, reforzarían el muro milán para evitar afectaciones.

Sin embargo, los vecinos se opusieron y no permitieron trabajo alguno, pues aún mantienen la suspensión de la obra. La respuesta de los representantes del proyecto fue que si no concluían el reforzamiento del muro los vecinos serían responsables del daño a la iglesia de San Sebastián; sin embargo, en Xoco tienen claro que las afectaciones fueron provocadas por las excavaciones que hicieron para la obra.

El inmueble que ocupa la capilla de San Sebastián fue catalogado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) como monumento histórico, pues data del siglo XVII.

A pesar de que ha tenido algunas intervenciones, no ha perdido su valor patrimonial; por ello, informaron los vecinos, ayer se presentó el coordinador nacional de Monumentos Históricos del INAH, Agustín Salgado Aguilar, quien determinará el grado de daño que tiene el monumento.

Asimismo informaron que el párroco de la iglesia ya presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público por los daños a la capilla, pues presenta algunas fisuras y grietas profundas.

Los vecinos han buscado a directores responsables de obra (DRO) para que realicen los dictámenes a las viviendas afectadas; sin embargo, pese a que se ha hecho la solicitud a personas conocidas y de reputación, éstas han rechazado el trabajo, pues temen que si se emite una opinión en contra del proyecto se ponga en riesgo la renovación del carnet, porque se trata de una obra importante para la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda.

Contra los señalamientos de las autoridades, que aseguran que Ciudad Progresiva cuenta con permisos, los vecinos reiteraron que no hay factibilidad de servicios, pues ya carecen del agua potable. Además les parece sorprendente que en tan poco tiempo se hayan dado todos los permisos cuando hay casos de vecinos que ni siquiera han podido obtener la autorización para arreglar un portón.