Durante los primeros 24 días de enero pasado, el gobierno federal recibió más de 4 mil 768.6 millones de dólares (casi 61 mil 694 millones de pesos) en financiamientos de inversionistas extranjeros a través de la compra de bonos de deuda pública, colocados en el mercado de valores.

Con este monto de recursos, los también conocidos como capitales golondrinos alcanzaron un nivel sin precedente de un billón 34 mil 940.48 millones de pesos, según reportes del mercado de valores.

A ese nivel, la participación de los inversionistas extranjeros en valores gubernamentales alcanzaron 27.4 por ciento del total, muy por arriba de los llamados inversionistas institucionales del país, como son las siefores, las sociedades de inversión o las compañías aseguradoras, que tienen 19.5, 12.36 y 4.9 por ciento, respectivamente.

De acuerdo con Arnulfo Rodríguez, analista de la casa de bolsa Banamex Accival, el repunte de capitales foráneos en bonos gubernamentales es resultado de una mejoría en la percepción de riesgo-país por parte de los inversionistas extranjeros. Pero también impacta favorablemente, acotó, las atractivas tasas de interés en México, buenos fundamentos macroeconómicos del país y la revaluación del peso en los mercados cabiarios.

Alejandro Padilla, analista de Banorte-Ixe, dijo que las tasas de interés en México para los bonos gubernamentales de largo plazo no se ven afectadas por las presiones inflacionarias. Esto, explicó, debido a que las noticias sobre política global han hecho pensar a los inversionistas que la tasa de referencia del Banco de México podría quedarse en un nivel estable de 4.5 por ciento por un periodo prolongado y mayor al que muchos tenían contemplado.

Esta visión se reforzó después de que la Reserva Federal de Estados Unidos anunció su intención de mantener la tasa de interés de corto plazo en niveles extraordinariamente bajos hasta finales de 2014 y no para mediados de 2013, como se venía contemplando anteriormente. Esta situación ha dado una buena estabilidad a las tasas nominales mexicanas, además de que noticias provenientes de Europa han disminuido la aversión al riesgo, precisó.

En estas condiciones los capitales golondrinos han sido atraídos por los rendimientos en el mercado mexicano, mismo que ha servido de refugio y es observado como más seguro aunque sus rendimientos son menores, por ejemplo, a los de Grecia.

Según la información sobre tenencia de valores gubernamentales, desde mediados de 2008 la crisis en Estados Unidos primero y de Europa después catapultó los capitales hacia mercados más seguros, entre los que se encuentran los emergentes, como México, que recibieron una verdadera oleada de recursos económicos.

En el caso mexicano, en julio de 2008 los inversionistas extranjeros apenas figuraban en la propiedad de bonos gubernamentales con un monto de 302 mil 546 millones de pesos; para finales de ese año incluso sufrieron una disminución, al ubicarse en 270 mil 113.8 millones.

Un año más tarde, en diciembre de 2009, el nivel se había recuperado y se ubicaba en 313 mil 180 millones de pesos, pero hacia el cierre de 2010 ya rebasaban 594 mil 590 millones.

Doce meses más tarde la tenencia de bonos gubernamentales entre inversionistas extranjeros llegó a 973 mil 246.3 millones de pesos, cifra que rebasó el billón de pesos el 6 de enero de este año.