La dirigencia nacional del PRI denunció ayer que desde los altos mandos del gobierno de Felipe Calderón se presiona al titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), José Luis Vargas Valdez, para que renuncie al cargo, supuestamente porque no ha querido actuar en contra del partido tricolor y de algunos de sus candidatos.

Se quiere sustituirlo por un funcionario a modo en pleno corazón del proceso electoral, declaró el presidente del PRI, Pedro Joaquín Coldwell.

Disponemos de información fehaciente que indica que esta decisión está en proceso de tomarse. Demandamos que se haga con absoluta transparencia y se explique si existen causas justificadas o no para removerlo, expuso el líder priísta. Asimismo, el grupo parlamentario del tricolor en la Cámara de Diputados informó que este martes el coordinador Francisco Rojas Gutiérrez acudirá a la Procuraduría General de la República (PGR) para presentar una denuncia sobre el presunto uso de recursos federales en los estados de Sonora y Durango para favorecer al PAN.

Anunció que ayer enviaría una carta a la titular de la PGR, Marisela Morales, en la cual le pide aclarar si existen presiones al fiscal. En la misiva resalta que sería grave la designación de un nuevo titular de la Fepade que no cumpla con los criterios de imparcialidad y legalidad que le corresponden a la fiscalía.

Si se lleva a cabo la sustitución, señala la misiva, la procuraduría debe explicar las causas. Sobre todo porque, añade, en fechas recientes se han despertado suspicacias en torno a la injerencia del Poder Ejecutivo, en un esfuerzo por criminalizar el proceso electoral y favorecer a Acción Nacional. Es inadmisible que la Fepade se convierta en un instrumento de esta política y vehículo para la persecución aviesa e ilegal de candidatos o militantes de partidos de oposición al gobierno.

Decisión inexplicable

También Pedro Joaquín Coldwell reconoció que el discurso de los partidos políticos se ha endurecido precisamente porque el gobierno de Calderón continúa interviniendo para tratar de ganar las elecciones presidenciales.

En este caso, debido a que el nombramiento del titular de la Fepade lo hace el presidente de la República, y toma la decisión sin explicarla, quedará claro que se quieren manipular las investigaciones sobre presuntos delitos electorales, y ello deteriorará el clima de confianza en las instituciones y pondrá en duda las credenciales democráticas de su administración.

Refirió que en el caso específico de Michoacán, la Fepade concluyó que el crimen organizado no había intervenido o influido en el resultado, y que en todo caso sólo habría podido resolver sobre la comisión de un delito electoral y no en materia de delincuencia organizada.

El senador priísta argumentó que si hacía esa declaración antes de que se diera el hecho concreto de la remoción del fiscal, no es por temor o paranoia, sino porque el sexenio de Felipe Calderón se ha caracterizado “por golpes como el michoacanazo y la filtración contra el candidato al gobierno de Jalisco (Arturo Zamora), que degradan las instituciones de procuración de justicia y minan la confianza en la democracia, y militantes de otros partidos que eran candidatos (de entidades) donde Acción Nacional tenía intereses electorales”.

Por su parte, el senador priísta Carlos Jiménez Macías manifestó: Nos parece gravísima a estas alturas la designación de un nuevo fiscal, quien corra el riesgo de no contar con criterios de imparcialidad o legalidad, expresó.

Subrayó: Es realmente aberrante. Hemos exigido información respecto de cuáles serían las causas por las que se removería al fiscal. No negamos que tenemos muchas suspicacias y dudas, porque recientemente se ha dado una injerencia del Presidente de la República, quien empuja una especie de campaña para criminalizar el proceso electoral y favorecer por esa vía a su partido.

Reacción panista

Por la noche, el Partido Acción Nacional rechazó que un posible relevo en la Fepade sea para beneficiar al blanquiazul de cara a la contienda federal, como acusó el PRI.

El dirigente nacional panista, Gustavo Madero, afirmó que todos los delitos y denuncias deben atenderse y perseguirse siempre, independientemente de que haya o no periodo electoral en curso, por lo que adelantó que apoyará las determinaciones que sobre la Fepade tome el Ejecutivo federal.