Moscú, 28 de febrero. Mientras la televisión bajo control del Estado no escatima recursos para promover la candidatura del primer ministro Vladimir Putin en su afán por volver a despachar en el Kremlin por tercera ocasión durante seis años más como presidente, la oposición rusa –sobre todo la no representada en el Parlamento– utiliza con creciente éxito los espacios de Internet como medio para sumar adeptos.

Desde la página web de la revista Snob, adquirida hace poco por el magnate y candidato presidencial Mijail Projorov, anoche tuvo lugar el estreno del programa Gosdep 2 (Departamento de Estado 2), llamado así como burla a la crítica gubernamental de que todo ruso que no respalde a Putin es financiado por Estados Unidos.

Conducido por Ksenia Sobchak –distanciada de quien es su padrino de bautizo, Vladimir Putin– el programa tuvo una primera emisión en el canal de televisión Muz-TV, pero una semana después lo clausuraron por supuesto “bajo rating” y, con toda probabilidad, por invitar a figuras de la oposición muy críticas con el Kremlin y darles la oportunidad de hablar sin censura.

La segunda edición de Gosdep-2, ya en Internet, reunió anoche a representantes de un amplio espectro de la oposición política y a un vocero del oficialismo. El próximo viernes, en diferido, llegará a más espectadores a través del canal de televisión RBK, también propiedad de Projorov.

Todo indica que el magnate cedió sus medios de comunicación, sin pedir un trato preferencial: la mayoría de los participantes del programa, salvo obvia excepción de Anton Krasovski, el jefe de su coordinación de campaña, coincidieron en señalar que Projorov es un palero al servicio del Kremlin y no un rival de Putin.

Todos, menos Maksim Shevchenko, defensor a ultranza del primer ministro, consideran que el 4 de marzo no habrá comicios, sino una farsa porque Putin quiere ser presidente vitalicio, con el apoyo de una corporación de estafadores y ladrones, según afirmó Aleksei Navalny, un joven abogado y bloguero que se hizo famoso por denunciar la corrupción en los consorcios públicos.

Los opositores en Rusia no tienen acceso a los grandes medios de comunicación –aparte de una emisora de radio, Ejo Moskvy, una publicación trisemanal, Novaya Gazeta, y un semanario, The New Times (con cabecera en inglés, pero editado en ruso), que informan de sus actividades y dan voz a sus líderes–, por lo cual recurren cada vez más a lo que los expertos denominan medios de comunicación horizontales, sin supervisión vertical de las dependencias oficiales.

Sin demora ni censura, la información fluye por las redes sociales y se difunde a través de Facebook, Twitter, LiveJournal, YouTube y muchas otras opciones, sin hablar de las numerosas páginas web que ofrecen una visión diferente a la oficial y organizan la transmisión audiovisual en directo de manifestaciones y otras protestas.

Además del canal de televisión RBK, existe la variante de Dozhd, otro canal que emite por satélite, cable y principalmente Internet. Tarde o temprano, los programas que son prohibidos o cancelados en la televisión pública aparecen de modo invariable en la red de redes con gran impacto en los jóvenes, que son mayoría entre los internautas rusos.

Comienza la reforma política

Los diputados de la Duma aprobaron este martes, en primera lectura, tres de las cuatro iniciativas de ley, presentadas por el todavía presidente Dimitri Medvediev, para mitigar el descontento que provocó en muchos rusos el ajuste de los resultados en las elecciones legislativas de diciembre pasado.

Aunque todavía deberán pasar dos instancias más en la Cámara de Diputados, para ser turnadas al Consejo de la Federación y después promulgadas por el jefe de Estado, las enmiendas adoptadas este martes buscan hacer más flexible la postulación de los candidatos a cargos de elección y el registro de los partidos políticos.

El otro cambio se refiere a los gobernadores de las entidades federales que, a partir de enero de 2013, volverán a ser electos por sufragio universal y directo, y no nombrados por el Kremlin.

La última propuesta de Medvediev, relativa a la formación de la Duma, que actualmente se compone de 450 diputados elegidos solamente por listas de partido, será discutida cuando este país ya tenga nuevo presidente.