Una carpeta con 10 estampas policromáticas, de igual número de artistas, arribó a la ciudad de México desde una ex hacienda cañera ubicada en Coatepec, Veracruz, en cuyo paisaje cafetalero y de montañas nubosas, varios artistas rescatan el grabado tradicional, además de experimentar y crear sus herramientas con materiales ecológicos.

La Ceiba: gráfica sustentable es la muestra que se presenta en el Foro 38 de la Universidad del Claustro de Sor Juana (UCSJ), y está integrada por 24 litografías, huecograbados y piezas de moku hanga (técnica japonesa).

En el taller veracruzano se ha desarrollado una propuesta totalmente mexicana de sustentabilidad, mediante la utilización de mármol de la región para sustituir la piedra litográfica importada de Baviera, Alemania. Además, ahí se diseñan los equipos de impresión y se fabrica papel y tintas con productos naturales, procesos que también se muestran a los visitantes.

En el salón del recinto universitario ubicado en el Centro Histórico de la capital del país, se conjuntan dos series donde concurren los trabajos de artistas consagrados con los de emergentes, obras que incluyen ballenas aladas, elementos indígenas y gallos/dragones.

El modelo de color sustractivo CMYK (acrónimo en inglés de cian, magenta, amarillo y negro) da origen a la decena de imágenes que parten de los procesos de la estampa tradicional, en los que participaron artistas invitados en 2011 por el taller La Ceiba Gráfica, con apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.

El resultado, que es el que se expone, responde al principio de tetranomía, el cual propone la creación de colores a partir del modelo CMYK, el mismo que se emplea en la impresión digital. La serie Litografía y grabado en color desde La Ceiba se compone en su mayoría de imágenes abstractas con la propuesta de cada artista.

Para complementar se exhiben 14 estampas en blanco y negro realizadas por jóvenes que se han acercado al grabado precisamente en el centro, dedicado no sólo a la producción, sino a la enseñanza e investigación de este arte, proceso de impresión descubierto en 1796 por el alemán Alois Senefelder.

Boxeadores entre café y naranjas

En la Orduña, ex hacienda cañera ubicada en Coatepec, cuya casona, que data de 1547, alberga el proyecto de exploración y difusión de las artes gráficas, también se realizan talleres y residencias para estudiantes, y está abierta al público interesado en la técnica del grabado. Es decir, donde alguna vez se sembró café y cítricos hoy surgen imágenes, frutos de La Ceiba Gráfica.

El dibujo de una pila holandesa, máquina para producir papel, es la aportación del artista sueco Per Anderson (1946), quien desde 1970 vive en Veracruz, donde fundó el centro dedicado a las artes gráficas en 2005, al lado del pintor, escultor, grabador, escritor y fotógrafo, Martin Vinaver (París, 1959).

Vinaver participa con una estampa en moku hanga, antiguo procedimiento oriental de grabado en madera con cualidades únicas, poco practicado en Occidente, por lo que el artista francés recrea sus elementos y los adapta en la enseñanza de la técnica.

Rafael Ruiz, quien codirige el taller junto con Anderson y Vinaver, imprimió unos boxeadores sicodélicos en huecograbado. El resto de los artistas participantes son Demián Flores, Carlos Pez, José Castro Leñero, Iván González de León, Yuko Sasai, Franco Aceves y Roberto Turnbull.

La muestra del taller La Ceiba Gráfica se exhibe desde el 8 de marzo, y permanecerá abierta hasta el 20 de abril, en el Foro 38 de la Universidad del Claustro de Sor Juana, ubicado en San Jerónimo 24, Centro Histórico (cerca de la estación Isabel La Católica, del Metro).