Jueves 15 de marzo de 2012, p. 44
Luego de asegurar que se frenó la ta-la clandestina en la zona de la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca, la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) informó que en el primer operativo nacional forestal 2012 se clausuraron 16 aserraderos clandestinos, además de que fueron asegurados 2 mil 500 metros cúbicos de madera en rollo y se puso a disposición del Ministerio Público a 16 presuntos responsables de delitos contra el medio ambiente.
En este operativo, se aseguraron 91 toneladas de carbón vegetal, 94 metros cúbicos de leña, 45 vehículos, siete motosierras, así como diversos equipos y herramientas, indicó la suprocuradora de recursos naturales, Adriana Rivera Cerecedo.
En conferencia de prensa, la funcionaria indicó que en algunas zonas del país siguen encendidos focos rojos por estar mayormente amenazados por la tala clandestina. Sin embargo, en algunas de éstas se ha logrado un embate fundamental a estas prácticas, como en la Reserva de Biosfera de la Mariposa Monarca, en la cual el año pasado se registró una deforestación de sólo media hectárea, lo que significa que prácticamente se logró frenar este delito y controlar estas actividades ilícitas.
Los resultados, dijo, se dan en el contexto del Programa Cero Tolerancia a la Tala Clandestina, que se estableció principalmente en Michoacán, en Morelos y en el Distrito Federal, pero que ha tenido avances en todo el territorio nacional, ya que de 350 mil hectáreas que se deforestaron en 2007, su número se redujo a 150 mil en 2011, lo que implica que se ha logrado inhibir este delito.
Incluso, si no se hubiera llevado a cabo el primer operativo nacional forestal, maquinaria, vehículos y herramientas confiscadas hubieran continuado con la tala y procesamiento de al menos 472 metros cúbicos de madera ilegal, es decir, cerca de 47 camiones que tienen un precio en el mercado negro de cerca de mil pesos por metro cúbico, apuntó.
Rivera Cerecedo sostuvo que en el primer operativo participaron 370 inspectores y abogados de la Profepa; 14 empleados de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y seis de la Comisión Nacional Forestal; 127 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional; 10 agentes del Ministerio Público Federal de la Procuraduría General de la República; 67 efectivos de la Policía Federal, 285 de la estatal y 87 de la municipal.
El gran reto de la Profepa, dijo, es tener bajo control e inhibir la tala clandestina.