Bogotá. Arauca, uno de los departamentos con presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), fue escenario ayer de una reunión de la cúpula militar colombiana con el presidente Juan Manuel Santos para evaluar la situación de seguridad en esta región fronteriza con Venezuela. La urgencia de trasladarse a este sitio fue consecuencia de la muerte de 11 soldados durante un ataque de las FARC contra un puesto militar de la zona rural del municipio de Arauquita. El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, dijo que la acción guerrillera tuvo el fin de dar visibilidad pública a las FARC, cuando prepara la liberación de 10 policías y militares cautivos. Al final de la reunión con los mandos, Santos negó que haya condiciones del gobierno para recibir a los uniformados.