De fondo, la desidia que derivó en impunidad, dice asociación civil
Jueves 22 de marzo de 2012, p. 51
Montevideo, 21 de marzo. En horas recientes, la policía, las autoridades sanitarias y las asociaciones de usuarios de la salud de Uruguay han recibido centenares de denuncias de familiares de fallecidos en dos hospitales donde trabajaban dos enfermeros que confesaron haber cometido 16 homicidios de pacientes.
El Movimiento Salud Para Todos recibió 250 llamadas, dijo su presidente, Rubén Bouvier, quien denuncia que detrás del sórdido caso están “la desidia y la falta de controles.
Tenemos un volumen de información muy grande con casos muy graves que se agregan a toda esta situación
, indicó Bouvier.
Ariel Acevedo confesó haber asesinado a 11 pacientes en un Centro de Tratamiento Intensivo neuroquirúrgico de la clínica privada Asociación Española, una de las más grandes de Uruguay, donde trabajaban los dos acusados y una enfermera procesada por encubrimiento.
El otro acusado, Marcelo Pereira, admitió haber cometido cinco homicidios en una unidad de cuidados intermedios del hospital Maciel.
Según fuentes judiciales, Acevedo asesinaba inyectando aire por vía intravenosa, lo que provocaba embolia pulmonar y paro cardiaco; Pereira inyectaba anestésicos.
Aunque la hipótesis policial es que los enfermeros no actuaron en conjunto, sí se ha dicho que se conocían.
Bouvier sostiene que no sólo en la Española y en el Maciel sucedieron este tipo de cosas
y afirma que tienen información sobre muertes sorpresivas en centros de salud de todo el país.
Escuché una cantidad interminable de historias de familiares de pacientes fallecidos que me dejan un panorama agotador, triste, desolador
, señaló, enfatizando que todo esto tiene como causa central la desidia y la falta de controles. Y eso lleva a estos hechos y a la impunidad
.
Aportarán más pruebas ante la justicia
La organización planea reunir los datos de todos los casos y presentarlos ante el juez Rolando Vomero, quien el domingo procesó con prisión –lo que implica que empieza el juicio– a los tres señalados.
La gente tiene miedo de denunciar en los centros de salud por las represalias que se puedan tomar con sus familiares
, aseguró Bouvier.
En la Unidad de Información al usuario del Ministerio de Salud Pública, el martes se recibieron 67 consultas de familiares de fallecidos en esos sanatorios, dijo el miércoles Elena Clavel, directora general del Sistema Nacional Integrado de Salud.
La Dirección General de Crimen Organizado, a cargo de la investigación policial, sumó más de 200 denuncias que ahora los investigadores deberán revisar, según el diario El País.
Ni las autoridades sanitarias ni la policía quieren manejar cifras o periodos en los que habrían actuado los enfermeros, que trabajaban desde hace más de una década en la salud, lo que alienta los temores de que las víctimas puedan ser decenas, o incluso centenares.
No sabemos desde cuándo actuaban y probablemente nunca lo sepamos
, admitió una fuente del Ministerio de Salud Pública.