En el primer día del asueto de Semana Santa, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y las centrales de autobuses lucieron abarrotadas por viajeros que lo único que querían era abandonar lo antes posible el Distrito Federal, para no perdernos ni un día de vacaciones.

En un recorrido que realizó ayer La Jornada por las terminales 1 y 2 de AICM y las centrales de autobuses del Sur, Oriente (TAPO) y del Norte, constató la salida masiva de capitalinos, particularmente hacia destinos de playa como Acapulco, Cancún, Los Cabos, Ixtapa y Huatulco, pero también muchos determinaron ir a visitar a sus familiares al interior del país.

Cargados con infinidad de maletas y bultos, algunos de los paseantes, sobre todo los que harían su viaje por carretera, reconocieron que sus finanzas no se encuentran en condiciones de soportar dos semanas de asueto, pero eso poco les importó.

No me iba a quedar aquí, prefiero ir a tumbarme a la playa; además, no vamos a salir de vacaciones en verano, adujo Sofía, una joven mamá que viajó con sus dos hijos a Acapulco.

La señora Beristáin con sus tres hijos se dispuso ayer a viajar a Cozumel, y pese a la larga fila que tuvo que hacer para documentar sus equipajes en la Terminal 1 del AICM dijo estar contenta de salir del Distrito Federal aunque sea sólo esta semana. También Carlos Alcudia, quien se preparaba para volar a Mérida, ciudad en la que pasará las dos semanas de vacaciones, dijo estar contento por esta pausa laboral. Aunque el AICM estaba muy concurrido, y de acuerdo con personal de mostrador de algunas aerolíneas las esperas eran de más de 40 minutos, Alcudia descartó haber tenido algún retraso en su vuelo por la gran afluencia de paseantes.

En la Terminal 2 del AICM personal de aerolíneas, así como de las áreas de comida, señaló que el arranque vacacional es bueno, pues desde temprano el arribo de pasajeros fue constante y copioso y las ventas también subieron en relación con los días normales. En el área de alimentos de la Terminal 2 se observó la persistente llegada de viajeros, algunos de los cuales optaron por adquirir sus menús ahí para no tener que padecer la comida del avión, comentó un viajero a su familia previamente a un vuelo al extranjero.

Tanto en el AICM como en las centrales el personal de venta de boletos reportó que no obstante la alta demanda había disponibilidad de espacios; sólo para el caso de algunos populares destinos de playa ya no había vuelos en ciertas aerolíneas para principios de la semana, pero sí para la segunda de asueto.

En las centrales y el aeropuerto el personal de mostrador sostuvo que el cambio de horario no es problema para las empresas ni para los usuarios, pues se da la información con antelación y los cambios de hora se reflejan en todas las pantallas de información.