El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenaron el asesinato de la periodista Regina Martínez, corresponsal de la revista Proceso en Veracruz.

Ambos organismos demandaron a las autoridades mexicanas una investigación oportuna para resolver esa muerte y sancionar a los responsables.

La titular del ACNUDH, Navi Pillay, llamó al gobierno de México a aplicar de inmediato medidas de protección para evitar más crímenes atroces contra los trabajadores de los medios de comunicación.

A su vez, Rupert Colville, vocero de esa entidad, lamentó que de 2000 a la fecha hayan sido asesinados 70 reporteros en el país, lo que daña el ejercicio de la libertad de expresión.

La Relatoría para la Libertad de Expresión de la CIDH manifestó su preocupación por la persistente violencia contra los comunicadores en México, e informó que el homicidio se suma al de diez comunicadores asesinados durante 2011.

La relatoría condena el asesinato de la periodista Regina Martínez y exhorta a las autoridades a realizar una investigación diligente y oportuna que permita identificar y condenar a los responsables.

La organización internacional Reporteros Sin Fronteras también expresó preocupación por el crimen y respaldó la iniciativa de la revista Proceso para exigir la presencia de un periodista en las investigaciones.

Este asesinato, resaltó la organización, engruesa la espantosa lista de 80 periodistas asesinados y 14 desaparecidos en una década en México.