Oslo, 1º de mayo. El nadador noruego Alexander Dale Oen, campeón del mundo y submonarca olímpico en 100 metros estilo pecho, murió de forma súbita mientras entrenaba con el equipo nacional en Estados Unidos, anunció la federación de natación de su país.

Dale, quien ganó la medalla de oro en el campeonato del mundo de Shanghai en julio de 2008 y fue medallista de plata en los Juegos Olímpicos de Pekín ese mismo año, fue encontrado muerto en las regaderas junto a la piscina, en Flagstaff, Arizona, donde la selección noruega se prepara para los Juegos Olímpicos de Londres.

Aún se desconoce la causa de la muerte de Alexander Dale, quien sólo tenía 26 años.

Luego de su traslado al hospital y de más de una hora intentando reactivar su corazón para salvarle la vida, los galenos certificaron su fallecimiento a las 21 horas locales del pasado lunes, de acuerdo con un comunicado de la federación del país europeo.

Estamos conmocionados, es una experiencia extracorporal para todo el equipo aquí, declaró el entrenador del equipo, Petter Loevberg.

Según la edición digital del diario noruego Aftenposten, Dale había hablado con su familia por Skype –popular servicio de videollamadas a través de Internet– poco antes de la noche y nada sugería que pudiera estar enfermo.

Durante los Juegos de Pekín Alexander Dale se convirtió en el primer nadador en ganar una medalla olímpica para Noruega.

Mis pensamientos van en primer lugar y principalmente hacia su familia en Oygarden. Este es el día más duro que ha tenido el deporte de la natación en Noruega, dijo en un comunicado Per Rune Eknes, presidente de la federación de natación del país europeo.

El nadador ganó el título mundial el año pasado en el periodo inmediatamente posterior a la masacre de 77 personas a manos del ultraderechista Anders Behring Breivik, en el centro de Oslo y en la isla de Utoya.

Dale recordó a los fallecidos en los ataques tocando la bandera de su país que llevaba en el gorro de natación cada vez que entraba a la terraza de la piscina.

En los juegos de Londres, el noruego era uno de los favoritos para adjudicarse el oro.