León, Gto., 3 de mayo. La propuesta de Enrique Peña Nieto en materia de seguridad social se tradujo en un compromiso –firmado ante notario público– para establecer la pensión universal en favor de todos los adultos mayores de 65 años.

El Día de la Santa Cruz, en un desarrollo inmobiliario de casitas de interés social –donde los espacios no superan los 38 y 54 metros cuadrados por domicilio–, el abanderado de la coalición Compromiso por México (PRI-PVEM) afirmó que, en el terreno de su responsabilidad, se ha propuesto impulsar la seguridad social para todos los mexicanos.

Voy a tomar un compromiso muy importante: en México viven 7.5 millones de personas adultas mayores y sólo 3 millones tienen seguridad social y pensión. Vamos a darla a 4 millones y medio más, puntualizó.

De tal forma, suscribió su compromiso número 47 de campaña ante el notario público número 89, Horacio de Anda Alcalá.

Antes, se comió un taco de carnitas, mientras trabajadores de la construcción y sus familias devoraban la carne y el chicharrón, acompañados de salsas verde y roja. El candidato bromeó al tomar el micrófono: “cuando llegué vi algunas caras tristes, como que hacen falta el piquetito y la chela; esos vienen después de que nos vayamos”, y los comensales le aplaudieron con ganas.

Ante cientos de escuchas prometió que en caso de ganar la contienda presidencial impulsará el derecho a la salud para todos, aplicar seguros de riesgo de trabajo y de desempleo, y pensión universal para el retiro a adultos mayores de 65 años.

Peña Nieto llegó hasta el desarrollo habitacional llamado Villaurbi –enclavado en una colina semidesértica– para festejar el Día de la Santa Cruz (día del albañil). El acto fue organizado hasta el último detalle.

Decenas de ayudantes se movilizaron para abrir paso al candidato. Paradójicamente, el blanco de los empujones y los manoteos del equipo era el grupo de reporteros que dan seguimiento al abanderado priísta. Incluso, en un momento de reclamos entre un periodista y un escolta, Peña Nieto tuvo que intervenir para que sus acompañantes cercanos dejaran de hostigar a los representantes de los medios de comunicación.

Al abandonar las Villaurbi, el candidato salió casi en vilo. Saludó a casi todos los asistentes, se tomó la foto con todo aquel se lo solicitó y permitió que las mujeres lo abrazaran y apapacharan.

Antes de subir a su camioneta Suburban respondió a la pregunta en torno al homicidio de la periodista Regina Martínez: que se haga justicia y que la autoridad encargada de la investigación de estos hechos realmente dé con los responsables; es un tema mayor. Que se combata la impunidad, que nadie quede al margen de que se le aplique la ley, y cuando ha habido un hecho lamentable o cualquier otro delito cometido, y más cuando se trata de periodistas, me parece que además debe haber eficacia para dar con los responsables.

También se le preguntó sobre la decisión de Televisión Azteca de no trasmitir el debate presidencial del próximo domingo.

“Ya hemos señalado que corresponde al IFE encontrar los canales para tener mayor cobertura del debate, y está en ellos y en su capacidad de gestión que esto se logre.

Como he señalado, mi decisión es participar en el debate, y tengo entendido que ya hay varios medios que estarán transmitiéndolo, lo cual celebro. Como he indicado antes, hago una amplia invitación a toda la ciudadanía para que lo sigan a través de los medios que habrán de darle cobertura, que estén pendientes de él y puedan fortalecer la decisión que están meditando y han pensado para el primero de julio.