En el gobierno del cambio verdadero habrá legalidad, porque se “va a combatir a la delincuencia común –por decirlo de alguna manera–, pero también a la de cuello blanco; va a haber una verdadera legalidad. Vamos a tener un recto proceder”, sostuvo Andrés Manuel López Obrador, candidato a la Presidencia por la coalición Movimiento Progresista.

Antes de viajar a Hermosillo, Sonora, y de ahí a Nogales –región asolada por las mafias del narcotráfico y la trata de personas– en conferencia de prensa matutina habló sobre su propuesta de combate a la inseguridad.

Habrá autoridad con fortaleza, y esa fortaleza va de la mano de la autoridad moral que tenemos. La autoridad representa a todos. ¡Que no se combata a unos y se proteja a otros, que no haya impunidad! Que no exista la suspicacia de que se combate a una banda y se proteje a otra. !No! Reglas claras. Se va a combatir a todos por igual, se dediquen a lo que se dediquen. No estamos atados a nadie. Nuestro amo va ser el pueblo de México.

La presencia del Ejército en Sinaloa es tema de importancia para los habitantes de la entidad, al preguntarle si ordenará el retiro de los militares a los cuarteles, López Obrador señaló: Una vez que se tenga una policía nacional, capacitada y moralizada. Se tiene que cuidar al Ejército. Es una institución muy importante para la República; no se le debe socavar ni utilizar en labores de seguridad pública. Va a ser gradual su retiro, porque si se saca al Ejército así, se deja en estado de indefensión a la ciudadanía.

Seré un presidente itinerante

Los periodistas mazatlecos le preguntaron sobre la violencia, y el candidato expuso cómo gobernaría: Voy a ser un presidente itinerante. Cada determinado tiempo la sede de los poderes de la República va a estar en una región del país. Cuando fui jefe de gobierno recibía el parte de lo sucedido en el día. Todos los días voy a atender el problema que aqueja a los mexicanos, el de la inseguridad. Esto requiere de coordinación y mando. A quienes nombre secretarios de la Defensa y de Marina estarán a las seis de la mañana; vamos a hacer valer lo de jefe supremo de las fuerzas armadas.

–Gabriel Quadri y Enrique Peña Nieto dicen que usted trae un discurso de odio.

–Es lo mismo. Es lo que escribió Liébano Sáenz y, sin ánimo de polemizar, lo repitieron Héctor (Aguilar Camín), (Pablo) Hiriart; no tarda en salir Salinas; ahora (Enrique) Peña.

Decían que nosotros no representábamos nada, que eran inalcanzables y ahora se nos lanzan con eso. ¿En qué quedamos? Yo les digo que se serenen, que se tomen un té de tila en la mañana, al medio día y en la tarde. Estamos haciendo un llamado a la reconciliación, nuestro movimiento ha sido y es pacífico. No tenemos enemigos ni queremos tenerlos.

–¿Por qué no trae consigo un gran despliegue de resguardo?

–Algunos políticos hasta se exceden, es por fantochería (el uso de seguridad), como si fuese eso tan decisorio. Si hay la idea de hacer daño, lo hacen. Nosotros actuamos de buena fe, lo que queremos es justicia.

López Obrador respondía preguntas en la conferencia de prensa y en pocos minutos el avión tomaría pista para volar a Hermosillo. No obstante, reiteró su llamado a los gobernadores de todos los estados a no intervenir en la elección del primero de julio en favor de nadie. Un día antes, convocó a Mario López Valdez a no impulsar a nadie con dinero público.

“El exhorto al gobernador de Sinaloa lo hice de buena fe. Hay la mala costumbre de que los gobernadores se dedican a apoyar a candidatos y partidos, y esto es antidemocrático. En lo personal pueden expresar su simpatía y respaldo, pero en su carácter de gobernador no deben utilizar la estructura, el presupuesto ni los programas de gobierno para favorecer a candidatos y partidos.

Esta es una práctica en los gobiernos del PRI. Se condiciona a los beneficiarios de programas para que voten por el PRI. Si un gobernador garantiza que las elecciones van a ser limpias y libres y no toma partido, actúa como demócrata. Esto va para Chihuahua, Tabasco, Baja California; para todos los gobernadores, hacerles un llamado a que no utilicen el aparato gubernamental para beneficiar a su partido.

Panistas y priístas votarán por nosotros porque desean un cambio verdadero, sostiene

Roberto Garduño, Enviado

Nogales, Son., 16 de mayo. El PRI pensó que haciendo una telenovela impondría a Enrique Peña Nieto y no le está funcionando, se está poniendo nervioso, señaló Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista.

Bajo intenso calor, replicó al candidato del PRI: “Ahí está (Enrique) Peña culpándonos de todo. Anda lanzándose contra nosotros. No les está funcionando su estrategia de controlar a través de los medios de comunicación.

Quieren imponer a Peña Nieto con la publicidad, con la mercadotecnía, pero no les está funcionando. Decían que iban en caballo de hacienda, blindados, protegidos por la televisión. Pensaban que era un asunto de hacer una telenovela y que con eso iban a ganar, pero no es así: el pueblo es mucha pieza.

En esta frontera ayer continuaron las historias de sangre, cuando se supo que habían sido ejecutadas cuatro personas.

Antes de llegar a Nogales López Obrador se encontró en el restaurante Elba, ubicado en el pueblo de Santa Ana, con el arzobispo de la ciudad, Ulises Macías. Conversaron brevemente y se despidieron.

Nogales da cobijo a una ciudadanía incrédula sobre los políticos que sólo han medrado con sus votos. El índice de participación en comicios es bajo, entre otras causas por la proliferación de población flotante.

Ayer, el candidato de las izquierdas logró reunir a 2 mil mujeres y hombres que soportaron los inclementes rayos de sol.

Ahora no nos verán la cara

Doña Rosario Hernández, de 67 años de edad, esperaba guarecida junto a un muro. Vive sola. Sus hijas se fueron a Tucson y ella no tiene visa para alcanzarlas. Desde hace seis años, dice, me sumé a la campaña de López Obrador. En Nogales ganamos y nos robaron la elección porque no supimos cuidar las urnas. Ahora ya no nos verán la cara, se lo juro, prometió.

Antes, en Hermosillo, López Obrador presentó un diagnóstico sobre la situación sonorense: lo principal es la falta de trabajo. Sonora es, después de Chihuahua, el estado con mayor extensión territorial y tiene muchas riquezas.

“Hay una gran riqueza minera, pero no se quedan los beneficios en el estado, y eso es lo que vamos a buscar: que haya beneficios para las regiones donde se explotan el oro, la plata y el cobre.

Se van a respetar las concesiones, no se van a expropiar bienes, pero sí vamos a pedir que se paguen los impuestos para que ese dinero sirva al desarrollo regional en Sonora y en todo México.

–En Sonora la izquierda ha perdido fuerza –se le dijo.

–En Sonora vamos a ganar la Presidencia de la República. Van a votar por nosotros no sólo militantes de PRD, PT y Movimiento Ciudadano. Van a votar por nosotros militantes del PAN y del PRI.

–¿Por que?

–La única opción, la única posibilidad de sacar adelante a México es que haya un cambio verdadero y eso es lo que nosotros representamos. Esto va más allá de los partidos políticos. Lo que se está resolviendo es el destino de la nación. Es una elección para elegir qué queremos. Y creo que la gente quiere un cambio verdadero. Vamos a ganar en Sonora.