Reportan al menos 12 desaparecidos, 14 mil personas desalojadas y numerosos derrumbes
Estamos preparados para enfrentar la emergencia, asegura el primer ministro Mario Monti
Miércoles 30 de mayo de 2012, p. 32
Roma, 29 de mayo. Una serie de sismos sacudieron hoy el nordeste de Italia y causaron al menos 16 muertos, cerca de 350 heridos, unos 12 desaparecidos y 14 mil desalojados, así como derrumbes, daños en edificios, fábricas y monumentos históricos, lo que causó pánico entre la población y que miles de personas huyeran de sus hogares.
El principal sismo de 5.8 grados Richter ocurrió a las nueve de la mañana en la región de Emilia Romaña, entre las más pobladas e industrializadas de la península, por lo que la mayoría de las víctimas eran obreros. Se trata de la misma zona afectada por el terremoto del 20 mayo, que dejó seis muertos y unos 5 mil desalojados.
Otras dos réplicas de 5.3 y 5.1 grados Richter sacudieron horas después la misma región. El epicentro se localizó no lejos de la ciudad de Módena, y afectó además otras provincias como Ferrara, Piacenza, Montova y Bolonia, así como daños menores en Rovigo y Reggio Emilia.
Tres personas murieron en San Felice del Panaro en el derrumbe de una fábrica, dos en la localidad cercana de Mirandola, una en Concordia y otra en Finale, indicó el comandante de los carabineros de Módena, Salvatore Iannizzotto.
Superaremos este momento
, dijo el presidente Giorgio Napolitano. El jefe de gobierno italiano, Mario Monti, interrumpió una reunión para tranquilizar al país y garantizar que el Estado está preparado para enfrentar la emergencia
, y ofreció ayuda en un plazo breve
.
En el sismo falleció el párroco de Rovereto di Novi, y se desmintió la noticia de la muerte del jerarca de la catedral de Carpi.
El Papa manifestó su dolor y cercanía
a las víctimas del terremoto, indicó su vocero.
Es un desastre
, comentó atónito el alcalde de San Felice sul Panaro. En esa ciudad, tres obreros: un italiano, un marroquí y un indio murieron por el derrumbe de la fábrica.
El temblor se sintió en centro y norte de la península y afectó sobre todo estructuras de fábricas que se desplomaron cuando los obreros trabajaban.
Los nuevos sismos han provocado daños a edificios históricos y 75 por ciento de la ciudad de Cavezzo se derrumbó. En Bolonia fue cerrada la estación central de trenes, las líneas telefónicas no funcionaron por un par de horas y la sede de la alcaldía fue evacuada.
En Mirandola varias iglesias y la catedral sufrieron graves daños. En toda la zona el sismo provocó el derrumbe de edificios que ya habían resultado afectados por el temblor de mayo que fue de 6 grados Richter.
También se sintió en Bolzano, cerca de la frontera con Austria y en Milán. En Toscana, en particular en Florencia y en Pisa, las oficinas públicas fueron evacuadas por precaución. La mayoría de las escuelas de la región, incluida Milán, fueron evacuadas por temor a réplicas.
En Venecia una estatua se cayó cerca a la céntrica Piazzale Roma, mientras un partido de futbol entre Italia y Luxemburgo fue suspendido. Desde hace unos diez días han ocurrido numerosos movimientos telúricos en la península.