Morelia, Mich., 26 de junio. En uno de los actos de campaña del PRI donde la desorganización y el caos superaron a los de cualquier otra plaza, con varios lastimados, el candidato Enrique Peña Nieto admitió lo lejano que por lo general resulta el quehacer de la política para la gente. Y eso es lo que queremos cambiar para que las familias se vean favorecidas y alcancen mayor igualdad social: ése es el compromiso.

Utilizado para espectáculos de charrería y conciertos, el Pabellón don Vasco, ubicado en la salida a Salamanca, desde temprano fue infranqueable para cientos de personas traídas de diversas regiones, las cuales, por paradojas de la seguridad y la convocatoria partidista, quedaron atrapadas tras portones y rejas.

Pero quienes sí lograron acceder, sobre todo integrantes de organizaciones gremiales y seguidores del una vez más aspirante a la alcaldía de Morelia, Wilfrido Lázaro Medina, ovacionaron a Peña Nieto, quien ofreció elevar a rango de ley su propuesta de otorgar pensión a los adultos mayores de 65 años.

Así, mientras el aspirante local lucía su fervor partidista y aseguraba a Peña Nieto: Has sensibilizado al país con tus ideas, con tus propuestas, y ahora tienes el corazón lleno de bondades y buenaventuras que te desean los mexicanos, en la calzada del Tecnológico, unos 200 activistas del movimiento #YoSoy132 expresaban su rechazo al priísta.

Con pancartas con mensajes como Michoacán no te quiere y Fuera Peña Nieto, permanecieron desde las 11 horas afuera del pabellón, pero ante la presión de los activistas y simpatizantes del PRI, se trasladaron a la acera de enfrente, donde siguieron con su protesta durante más de una hora y luego se dirigieron hacia el centro histórico.

Así, el primer acto del penúltimo día de campaña, en el que incluso algunas personas dieron portazos, Peña Nieto insistió: No podemos confiarnos. Este es el momento de trabajar y comprometernos.

Alcanzará el triunfo, agregó, porque le quiero servir a México, quiero poner mi capacidad, entrega y esfuerzo al servicio del país. Recalcó su interés por reconocer la diversidad, pluralidad y diferencia de pensamientos e ideologías de la sociedad mexicana y a partir de ahí lograr las grandes metas nacionales. Aprovechó para dar la bienvenida a la causa priísta a Judith Cervantes Calderón, candidata de PRD-PT a la diputación federal por el distrito 10 de Morelia, quien esta semana se mudó de partido.

A partir de esa variedad de visiones, ofreció trabajar en un proyecto incluyente y sin derrotados, porque tras 89 días de campaña, él ha alcanzado mayor conciencia para reconocer las fortalezas y ventajas del país y a partir de su propuesta clara y puntual, poder lograr que con las acciones, proyectos y reformas estructurales que me propongo, se eleve la calidad de vida de los mexicanos y las familias tengan mejores ingresos.

De todos esos propósitos, Peña Nieto resaltó su interés específico por dar a los michoacanos paz y libertad para vivir tranquilos. Todo ello, subrayó, a partir de abandonar el escenario de violencia e inseguridad que, como en muchas otras partes del país, también, lamentablemente, aquí se padece.

Al final, firmó cinco compromisos para la región: modernizar el libramiento de Morelia en el tramo de la salida a Salamanca y Quiroga, construir un hospital infantil, modernizar la carretera Pátzcuaro-Tacámbaro, equipar el hospital regional de Ciudad Hidalgo y crear una nueva comisión para el desarrollo hidráulico de las cuencas de Tierra Caliente y Costa.