Economía
Ver día anteriorDomingo 1º de julio de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 

Temor de que una demora excesiva genere nuevas incertidumbres en los mercados

Impugnan en Alemania la contribución al nuevo fondo de rescate europeo
Foto
Imágenes de la crisis. Una mujer pasa frente a una tienda de ropa que cerró en Pontevedra, EspañaFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Domingo 1º de julio de 2012, p. 30

Berlín, 30 de junio. El nuevo fondo europeo de rescate tendrá que esperar para recibir el aporte de Alemania, su mayor contribuyente, debido a los numerosos recursos en su contra presentados ante la Justicia alemana.

Tanto el pacto de disciplina fiscal –acordado hace unos meses por 25 de los 27 países que conforman la Unión Europea, con Alemania a la cabeza– como el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), dos pilares de la estrategia anticrisis de la canciller Angela Merkel, fueron ratificados la noche del viernes en ambas Cámaras del Parlamento.

Sin embargo, el Tribunal Constitucional pidió al presidente Joachim Gauck que no los firme (paso final que los convierte en ley), para estudiar los recursos que intentan frenar su aplicación. Los expertos temen que una demora excesiva genere nuevas incertidumbres en los mercados.

Las políticas de Merkel, líder de la potencia europea, están perdiendo solidez tanto en Alemania como en la propia Unión Europea. La prensa europea considera a la canciller la gran perdedora en la cumbre en la eurozona realizada el jueves y viernes en Bruselas, donde la canciller tuvo que aceptar medidas a las que se oponía rotundamente y que eran impulsadas por Francia, segunda economía del bloque, como por los países en el ojo del huracán por sus deudas: Italia y España.

Los europeos acordaron que el fondo de rescate de la zona euro inyecte ayuda directa a los bancos en problemas a partir del próximo año e intervenir en los mercados de bonos de deuda para apoyar a los países miembros con problemas.

El MEDE debía comenzar a funcionar este domingo. Pero la entrada en vigor del fondo con capacidad de préstamo por medio billón de euros (620 mil millones de dólares) podría retrasarse ahora hasta fines de julio. Mientras tanto, seguirá activo el antecesor del MEDE, el Fondo Europeo de Estabilización Financiera (FEEF).

Los más recientes recursos fueron presentados esta madrugada por Más Democracia, asociación ciudadana con unos 12 mil miembros, y por Peter Gauweiler, político de la Unión Cristianosocial (CSU). Estos recursos se suman a los presentados por la fracción parlamentaria del partido poscomunista La Izquierda y de un grupo de ciudadanos representados por un jurista de Nüremberg. La sexta demanda fue presentada hace varios días también por ciudadanos.

El partido La Izquierda considera que las condiciones de endeudamiento fijadas en el pacto fiscal y los riesgos del MEDE invaden ámbitos de decisión del parlamento.

Además, más de 40 diputados de los partidos que integran el gobierno –la Unión Cristianodemócrata (CDU), de Merkel, y los liberales– votaron en contra en el parlamento, por lo que la coalición no logró una mayoría propia de votos a favor, la llamada mayoría del canciller, de gran peso simbólico.

El diputado socialdemócrata (SPD) Thomas Oppermann afirmó: Vivimos el principio del fin de la era Merkel.

El pacto fiscal europeo fue impulsado por Merkel para exigir una mayor disciplina presupuestaria en Europa y firmado por 25 países de la UE, todos menos Reino Unido y República Checa. Su cumplimiento es requisito indispensable para que un país pueda solicitar ayudas del MEDE.

A su vez, el viceministro de Finanzas, Steffen Kampeter, negó un reporte de la revista Focus, según el cual el titular de la dependencia, Wolfang Schauble, habría dicho a los miembros del parlamento que se preparen para una moratoria de Grecia y su salida de la eurozona.

Grecia requerirá más ayuda

En Atenas, Joerg Asmussen, miembro de la junta de gobierno del Banco Central Europeo (BCE), señaló que los prestamistas internacionales de Grecia (la Unión Europea, el BCE y el FMI) están dispuestos a revisar algunas condiciones del programa que ofrece al país 130 mil millones de euros (165 millones de dólares) a cambio de que aplique estrictas medidas de austeridad, aunque no drásticamente. Aclaró que otorgar más tiempo a Atenas para que ordene sus finanzas requeriría más ayuda externa.