La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) rechazó reparar el daño, ofrecer disculpas y hacer una aclaración pública por los supuestos actos de tortura en que incurrieron sus elementos en agravio de personas que fueron detenidas luego de una balacera contra presuntos narcomenudistas, ocurrida en una vecindad de Tepito el 19 de noviembre de 2011.

La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) informó que la dependencia aceptó de manera parcial la recomendación 04/2012, en la que acreditó que al menos dos de las personas detenidas fueron torturadas, además de que realizaron detenciones arbitrarias y cateos ilegales.

En los puntos recomendatorios que sí fueron aceptados, la SSP-DF no reconoce los supuestos abusos de los uniformados en la acción policiaca y se limita a comprometerse a iniciar una investigación administrativa a todos los policías que participaron en la misma, incluidos mandos medios y superiores.

Asimismo, se compromete a publicar un manual de técnicas para el uso de la fuerza, que entregará a todos los policías adscritos a la corporación, así como establecer mecanismos de coordinación con la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) en las acciones policiacas en las que actúen de manera conjunta.

Ante esa aceptación parcial, la CDHDF envió a la SSP-DF un recurso de revisión para que reconsidere su postura, acepte los puntos rechazados y repare el daño a los afectados, cuyo plazo vence el lunes 16 de julio.

Cabe destacar que la recomendación 4/2012 fue enviada también a la Procuraduría General de Justicia, la Secretaría de Salud y la Consejería Jurídica capitalinas, instancias que sí aceptaron en su totalidad el instrumento, informó el organismo defensor de las garantías individuales.

En la balacera, ocurrida en una vecindad de la calle Tenochtitlán –la cual se originó luego de que un efectivo policiaco resultó lesionado de bala al tratar de impedir un asalto a un comerciante–, dos personas fallecieron y dos resultaron heridas, además de que nueve personas fueron detenidas.

En su investigación, la CDHDF acreditó agresiones físicas contra algunos detenidos. Incluso, en un video difundido en Internet se aprecia que a uno de los aprehendidos los policías le sumergieron la cabeza en una cubeta con agua.

Siete de las personas aprehendidas dijeron a la Comisión de Derechos Humanos haber sido detenidas sin motivo, así como ser agredidas física o sicológicamente. En la actualidad, los seis presuntos afectados son procesados por un juez penal, acusados de delitos contra la salud y/o portación de arma de fuego.