El elevado costo en la atención de los padecimientos crónico-degenerativos ya está provocando una enorme presión en las finanzas públicas, señaló el presidente Felipe Calderón, quien advirtió que la prevención es el único camino para garantizar la viabilidad del Sistema Nacional de Salud.

Al atestiguar la firma del convenio para reducir en 10 por ciento la sal en la producción del pan, dijo que de continuar en la misma ruta el país no será capaz de enfrentar el alto costo que implica la atención médica de estos padecimientos. Por ello, calificó esta medida como una de las más trascendentes para prevenir enfermedades cardiacas, infartos cerebrovasculares y padecimientos renales, tres de las principales causas de muerte entre los mexicanos.

En el acto, al que acudieron funcionarios del sector salud y empresarios de la industria del pan, el presidente Calderón comentó que 37 por ciento de los mexicanos padecen hipertensión, y se estima que con esta medida se puede disminuir hasta en una tercera parte este porcentaje. Se estima que entre 75 y 85 por ciento de la sal que consumen los mexicanos proviene de la ingestión de pan blanco.

Explicó que de acuerdo con expertos en nutrición, lo ideal es consumir dos gramos de sal en las comidas, pero los mexicanos ingieren cinco veces más, situación que se traduce en un mayor riesgo de hipertensión arterial, infartos y derrames cerebrales, entre otros padecimientos.

En las escalinatas de la residencia oficial de Los Pinos, Calderón destacó la transición epidemiológica que vive México, en la que, por una parte, está dejando atrás enfermedades de un país pobre, como las gastrointestinales o la poliomielitis, y por otra, va encontrando padecimientos que son más costosos, pero prevenibles.

Y podemos hacerlo. Esa es la gran paradoja de la salud en México y en el mundo ahora. Las enfermedades peores y las más costosas, que son curables, se pueden evitar. Se pueden evitar a través de una cultura de nutrición y de ejercicio oportuna, afirmó. Curar es bueno, pero prevenir es mucho mejor.

Agradeció a los empresarios, entre ellos los del Grupo Bimbo, no sólo esta decisión de colaborar en la reducción de sal en el pan blanco, sino también la que se tomó en el pasado reciente, con la disminución del consumo calórico en las golosinas que se expenden en planteles escolares.

Dijo que aunque los efectos no se vean de manera inmediata, estas decisiones serán fundamentales para reducir en un futuro los problemas de salud en la población en su conjunto.

Por su parte, el titular de la Secretaría de Salud, Salomón Chertorivsky, destacó que de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, la sal en exceso es factor de riesgo de varios trastornos y enfermedades, en particular hipertensión, cardiopatías, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal y obesidad.