Comenzó el futbol gótico mexicano
Rumbo a otra decepción olímpica
on buen nivel comenzó el futbol gótico mexicano –por aquello de Batman de María y Robin Compeán–, a pesar de que de los partidos Monterrey-América y Cruz Azul-Morelia se esperaba más, pero terminaron con empate sin goles.
Las Chivas holandesas le llenaron al Toluca su Bombonera y además del dinero le dejaron los tres puntos. El refuerzo tan anunciado –la afición– es de lo que se ha mantenido fiel, a pesar de los manejos de la pareja presidencial.
Fue sin duda el mejor partido de la jornada uno, con alternativas en ambas porterías, el regreso del Ojitos Meza al equipo que mejor le acomoda, la presentación de John van’t Schip y la noticia de que Rafael Márquez Lugo prácticamente igualó el récord goleador que logró en el América.
Lo bueno para el chiverío es que sus tres seleccionados olímpicos regresarán pronto a casa, luego de lo observado en las derrotas del Tri ante España y Japón.
Las dos caídas previas a los JO son una buena dosis de realidad para aquellos que ya le colgaban medalla a un deporte que históricamente sólo ha sumado decepciones olímpicas u olímpicas decepciones, que lo mismo es.
Al técnico Luis Fernando Tena se le perdió el equipo. A Giovani dos Santos lo quieren meter con calzador, pero el hijo de Zizinho luce fuera de ritmo luego de tanta inactividad y su inclusión afecta el juego colectivo que llevó a ganar el torneo de Toulon.
Además, varios tricolores ya se imaginaban en Europa. De Héctor Herrera se dijo que es observado por el Liverpool y el Manchester United, pero el tuzo debe retomar la concentración, el nivel que mostraba con la playera verde y evitar poses de crack que le provocaron costosos errores ante los nipones.
Marco Fabián se veía perdido, pero con su golazo ante los asiáticos demostró que sigue con la portería en la mente. También al medio tiempo de ese partido mostró dotes para participar en más comerciales: aventó su chicle al aire, le dio tres dominadas con los botines y con éstos lo regresó a la boca para seguir masticándolo en el complemento. Después de eso vino su tanto del empate momentáneo, así que nada hay que reprocharle.
El Flaco Tena deberá trabajar a marchas forzadas rumbo a su debut de este jueves ante Corea del Sur para rearmar un equipo que perdió la confianza y que además sufre lesiones de cinco jugadores.
En la liga MX los otros tres grandes no pasaron del empate.
El América y sus refuerzos de medio pelo rescataron la igualada en Monterrey y el técnico Víctor Manuel Vucetich los acusó de jugar a la defensiva. Es normal que así sea: las Águilas no se reforzaron al ataque y Chucho Benítez pelea más abandonado que el Llanero Solitario.
Cruz Azul y Morelia brindaron un buen duelo, a pesar de que tampoco hubo anotaciones. Ya sin los dos técnicos que casi llegan a las manos –Meza y el Jefe Boy–, la rivalidad decreció y lo mejor para los Cementeros fue el regreso de Gerardo Torrado y la inclusión de Pablo Barrera.
Pumas obtenía una victoria sobre Atlas en el Jalisco, hasta que al Pikolín Palacios le dio la malaria de los porteros mexicanos: no saben salir y casi él mismo anotó el tanto del empate a uno.
Otro grande, el León, tuvo un regreso triunfal al máximo circuito luego de una década en el oscurantismo del ascenso. Dicen los técnicos que se juega como se entrena: la pretemporada de los Panzas Verdes fue invicta y el técnico Gustavo Matosas pudo festejar en Querétaro, donde fue echado de mala manera.
Otra meta, se supone, es el juego limpio. El que madrugó fue el rojiblanco Érick Torres. Producto neto del futbol de barrio, el Cubo ha demostrado ser un jugador vivaz, pero con muchas mañas. Esta vez dio el pase con la mano que representó el gol de Márquez Lugo, lo que se suma a varias acciones similares que el jugador juvenil realizó el torneo pasado.
Pero los directivos poco le podrán recriminar si en su código de ética siguen el pacto de caballeros, la multipropiedad, la influencia de las televisoras y hasta de una casa de apuestas, todo esto prohibido por una no menos limpia FIFA.
