El Tiburón de Baltimore quedó cuarto en 400 combinado; el brasileño Pereira logró plata y el japonés Hagino, bronce
Por primera vez un chino, Sun Yang, obtuvo una dorada en la natación; luego Ye Shiwen se coronó con récord
Domingo 29 de julio de 2012, p. 2
Londres, 28 de julio. El fracaso de Michael Phelps y la confirmación del potencial de Brasil con la plata obtenida por Thiago Pereira marcaron este sábado el comienzo de la natación olímpica en los Juegos de Londres, donde también un chino, Sun Yang, obtuvo por primera vez una medalla dorada en este deporte. Además, su compatriota Ye Shiwen se impuso con récord mundial.
La primera sorpresa en el Centro Acuático se vivió al final de la tarde en la lucha por el oro de los 400 metros combinado hombres, donde lo inimaginable tuvo lugar y Phelps quedó sin podio, en la cuarta posición, detrás de su archirrival Ryan Lochte (4.05.18 minutos), Pereira (4.08.86) y el japonés Kosuke Hagino (4.08.94).
Phelps, quien defendía el título ganado en las dos ediciones pasadas, sufrió su primera derrota olímpica en ocho años y terminó cuarto, con 4.09.28, a más de cinco segundos de su récord mundial en la prueba.
Para tener una idea cabal de la dimensión de su derrota, hay que recordar que Phelps no había subido al podio olímpico una sola vez en toda su vida: cuando debutó en los Juegos de Sydney 2000 con 15 años y fue quinto en los 200 metros mariposa.
Es muy frustrante comenzar con una mala actuación. Fue una carrera desastrosa. Tuve suerte de llegar a la final
, admitió el nadador de Baltimore, quien arribó a Londres con el propósito de convertirse en el atleta con más medallas desde la creación de los Juegos.
En total, Phelps tiene 16 preseas olímpicas (ocho oros en Pekín 2008 y seis doradas y dos bronces en Atenas 2004), y en caso de ganar tres medallas aquí superará a la gimnasta soviética Larisa Latynina, quien obtuvo 18 entre 1965 y 1964.
De 27 años, Phelps ya había dejado muchas dudas en las eliminatorias disputadas por la mañana, en las que avanzó a la final en el octavo y último lugar por un margen de apenas siete centésimas sobre el húngaro Laszlo Cseh. Su futuro en la justa veraniega, donde se presentará en otras seis pruebas, es ahora una incógnita.
Si para Phelps todo fueron dudas, para Thiago Pereira la jornada fue mágica, ya que con su segundo puesto saldó su gran asignatura olímpica pendiente y demostró que las preseas de César Cielo en Pekín no fueron casualidad.
El inicio de la natación confirmó la irrupción de China, que sumó dos medallas doradas, su primera entre los hombres con Sun Yang en los 400 metros libre, y la segunda con récord mundial incluido, gracias a Ye Shiwen en 400 metros combinado femenil.
Shiwen, de 16 años de edad, fue superior a la estadunidense Elizabeth Beisel, quien terminó segunda (4.31.27 minutos), mientras la también china Li Xuanxu ganó bronce (4.32.91).
Ye paró el cronómetro en 4.28.43, para convertirse en la primera mujer que quiebra una marca mundial en piscina larga desde que se prohibió el uso de los trajes de poliuretano, a finales de 2009.
La china bajó en más de un segundo el récord de la australiana Stephanie Rice (4.29.45), logrado hace cuatro años.
Por su parte, Yang (3.40.14 minutos) superó al sudcoreano Park Tae Hwan (3.42.06), monarca en Pekín, y al estadunidense Peter Vanderkaay (3.44.69).
Park fue readmitido en la prueba tras ganar una apelación contra una descalificación en la ronda previa que se había producido por una salida en falso.
En la última final del día, Australia ganó oro en relevos 4x100 metros libre femeninos (3.33.15 minutos), superando a Holanda (3.33.79), que defendía su corona olímpica, y a Estados Unidos (3.34.24), que sólo consiguió el bronce, a pesar de incluir a su joven maravilla Missy Franklin (17 años).
En tanto, la estadunidense Dana Vollmer brilló al superar el récord olímpico en los 100 metros mariposa, que desde Sydney 2000 pertenecía a la holandesa Inge de Bruijn. En la prueba clasificatoria rumbo a la final de este domingo, cronometró 56.25 segundos, con lo que bajó en 36 centésimas la marca.
Sin embargo, el tiempo de Vollmer sigue por debajo del récord mundial de 56.06, establecido hace casi precisamente dos años por la sueca Sarah Sjostrom durante el Campeonato Mundial de Natación disputado en Roma 2009.