En la guerra, la verdad es una víctima; los ciberataques son una nueva realidad: experto
Sitios web de televisoras y agencias han sido hackeados para lanzar todo tipo de rumores
Jueves 9 de agosto de 2012, p. 25
Londres, 8 de agosto. El domingo, una cuenta hackeada de Reuters en Twitter quiso dar la impresión de una caída opositora en Alepo. El lunes, otra cuenta que decía pertenecer a un diplomático ruso anunciaba la muerte en Damasco del presidente sirio, Bashar Assad.
Más aún, el grupo opositor sirio Ejército Sirio Libre dijo en un video que subió a YouTube que había matado a un general ruso que asesoraba a Assad. Pero el militar, Vladimir Petrovich Kochyev, declaró hoy en Moscú: quiero confirmar que estoy sano y salvo
, indicó la agencia de noticias rusa Itar-Tass.
Rusia, que tiene decenas de asesores y técnicos en Siria, algunos en la base de mantenimiento naval rusa en el puerto de Tartus, ha dado a Siria su apoyo diplomático.
Y es que mientras la situación se agudiza cada vez más, las partes enfrentadas en Siria libran también un conflicto cada vez mayor en el ciberespacio, a menudo recurriendo a la desinformación y el rumor para inclinar la guerra a su favor.
El viernes, Reuters se vio forzada a cerrar temporalmente su sistema de blogs en Reuters.com tras la aparición de informes inexactos y no autorizados que citaban reveses militares para la oposición en Siria.
El domingo, la compañía adoptó una acción similar y suspendió la cuenta de Twitter @ReutersTech después de que pareció haber sido tomada, renombrada y usada para enviar una serie de tuits falsos destinados a minar aparentemente al Ejército Libre Sirio. Ambos incidentes son investigados.
No es la primera vez que un medio importante u otra organización han sido objetivo aparente de seguidores de Aassad.
Algunos ataques –incluida la destrucción de la web de la Universidad de Harvard el año pasado para colgar una foto de Assad con uniforme militar– han sido reivindicados por el Ejército Electrónico Sirio.
Pero el gobierno de Assad también ha vivido momentos embarazosos en el ciberespacio. El grupo de hackers Anonymous se atribuyó haber robado miles de correos electrónicos del gobierno sirio, incluidas comunicaciones personales entre Assad y su esposa. La serie entera fue publicada luego por Wikileaks.
Muchos sospechan que la oposición también ha hecho lo posible por difundir rumores sobre sus oponentes.
El lunes por la tarde, una cuenta de Twitter que se supone que era de un alto mando ruso, dijo que Assad había sido asesinado en Damasco, lo que desató una ola de rumores y llamadas telefónicas de agencias como Reuters, antes de que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia confirmara que la noticia era falsa.
Los ciberataques son una nueva realidad de la guerra moderna
, dijo Hayat Alvi, profesor de estudios de Oriente Medio en la Escuela de Guerra Naval de Estados Unidos.
Podemos esperar más de todas las direcciones. En guerra, la principal víctima es la verdad. Cada una de las partes intentará manipular la información para que parezca que su lado está ganando y que el otro está perdiendo
, añadió Alvi.
Dado que la oposición a Assad está desesperada por atraer a desertores –como el primer ministro, Riyad Hijab, que desertó el lunes– y el gobierno deseoso de evitar el apoyo exterior a los rebeldes ya respaldados por Turquía, Arabia Saudita y Qatar, hay mucho en juego.
El gobierno dominado por alauitas necesita demostrar que puede sobrevivir, mientras los rebeldes deben presentarse como un gobierno coherente a la espera y mantener controlada una posible infiltración de Al Qaeda.
En los últimos meses, en particular el Ejército Electrónico Sirio (SEA por sus siglas en inglés) parece haber adoptado una estrategia de extender la desinformación que ayude al gobierno de Damasco o que dañe a sus enemigos.
En abril, la cadena saudita Al Arabiya perdió momentáneamente el control de una de sus cuentas de Twitter, que entonces se usó para difundir una serie de historias que sugerían una crisis política en Qatar. Los tuits incluían afirmaciones de que el primer ministro qatarí había sido destituido, su hija arrestada en Londres y que estaba en marcha un golpe de Estado orquestado por el jefe del ejército.
En julio, Al Jazeera sufrió un ataque similar, y una de sus cuentas se usó para enviar una serie de mensajes a favor de Assad, incluido uno que acusaba al canal con sede en Qatar de inventarse pruebas de bajas civiles en Siria. Tales intercambios, según los expertos, se están volviendo parte de los conflictos.