Con la premisa de que hoy día las tecnologías de información y comunicación (TIC) modifican con rapidez cada vez más la manera de leer, escribir, informarnos y reflexionar, lo que repercute en los modos de enseñar y aprender, se ha puesto en circulación el volumen Las TIC en la escuela: nuevas herramientas para viejos y nuevos problemas.

Publicado por Océano Travesía, se trata de una compilación de ensayos escritos ex profeso por 18 especialistas de distintas disciplinas, países y edades, quienes analizan y cuestionan el uso de esas tecnologías, principalmente en el ámbito escolar; en el que se ven involucrados profesores, padres de familia y alumnos a partir del nivel prescolar, así como autoridades institucionales en materia educativa.

Coordinado por Daniel Goldin Halfon, Mariana Kriscautzky y Flora Perelman, el libro no trata sobre las computadoras o aparatos más novedosos que hay el mercado, sino del uso pedagógico de las nuevas tecnologías, no como la panacea de la educación, pero sí reconocer sus bondades e inconvenientes, al enfatizar que los más importante es enseñar a pensar, independientemente de la infraestructura que se utilice.

El volumen, que pretende distribuirse en unos 20 países de habla castellana, fue comentado la noche de este jueves por los especialistas Ana María Prieto, Inés Dussel, María Luisa Díaz, Verónica Estrada, Manuel Gándara y Daniel Cassany, así como los compiladores, en la Librería Rosario Castellanos del Fondo de Cultura Eeconómica.

No basta con doble clic

El libro Las TIC en la escuela ayudará a distintas personas que se sienten rebasadas por la marea de cambios y transformaciones, como maestros y padres de familia, que se encuentran inquietos por la dificultad de comprender las implicaciones de tanto cambio y que se pueden sentir desorientados o amenazados; o, en el mejor de las casos, se manifiestan curiosas y ansiosas por aprender y compartir, apuntó Goldin.

Inés Dussel, entre otros aspectos, destacó que “los procesos educativos llevan su tiempo, no es sólo el doble clic, ni lo que proponen esos discursos muy celebratorios de las nuevas tecnologías, sobre la idea de lo inmediato y de no necesitar más a los maestros o las escuelas porque el niños se enfrenta a la computadora y ya tiene ahí todos los conocimientos que necesita”.

Este libro ofrece una visión optimista y prudente al respecto, comentó Dussel.

Entre las ideas que se analizan, expresó Manuel Gándara, “esta que la tecnología por sí misma no es la panacea en materia educativa.

En México, como en otros países, las autoridades creen que con llenar de computadoras las aulas y esperar que con su sola presencia cambien las cosas, es muy iluso. Hay que entender realmente cómo incorporar la computadora a la escuela y cómo afecta a la cultura escolar y los procesos de aprendizaje. Se debe hacer mucha investigación en torno a la didáctica; es lo que ofrece este libro.