Acapulco, Gro., 16 de agosto. La reunión de la izquierda mexicana adoptó un resolutivo especial mediante el cual acordó luchar por rescatar la banda de 2.5 gigahercios (Ghz) para Multivisión (MVS), y una declaración de solidaridad con la periodista Carmen Aristegui.

Propuesto por el diputado federal electo José Ángel Ávila, el resolutivo indica: La libertad de expresión y el derecho a la información de los mexicanos no pueden ser moneda de cambio en el ejercicio de las atribuciones legales del gobierno respecto al otorgamiento, refrendo o retiro de concesiones a los permisionarios de los medios de comunicación, en este caso MVS, que preside el empresario Joaquín Vargas.

Ni los intereses económicos ni los intereses políticos deben estar por encima de los derechos de la audiencia. Derecho a ser debidamente informada mediante el ejercicio pleno de la libertad de expresión por los comunicadores, con independencia de posiciones ideológicas o cuestionamientos a las políticas y personajes públicos.

Agrega que el retiro de la concesión a MVS y las acusaciones de Vargas de que el gobierno pretendió chantajearlo “reiteran la necesidad de contar con una mejor legislación que, sin demérito de la rectoría del Estado, impida la discrecionalidad caprichosa del gobierno, que otorgue certeza jurídica a los concesionarios, fomente la competencia y cierre el paso a la concentración monopólica.

“Consignamos a Carmen Aristegui, voz imprescindible de nuestro México plural y diverso. Sería una pérdida que la suya –como la de otros comunicadores– se silenciara por intereses distintos a los de la sociedad, como es el derecho a estar debidamente informado”, señala respecto a la comunicadora.

Asimismo, considera “inaceptable e indigno que un gobierno sea presa de los intereses corporativos de cualquier consorcio, por más poderoso que éste sea, pero también es inadmisible que la autoridad utilice arbitrariamente las herramientas que le da la ley para someter a los particulares, privándolos de sus derechos, por no acatar sus pretensiones o designios.

Hacemos un llamado a que los hechos sean total y debidamente aclarados y se actúe en consecuencia, concluye la propuesta aprobada por unanimidad.

El Ejecutivo ya no fijará agenda legislativa

Al hacer un resumen de los acuerdos de las siete mesas de trabajo, Jesús Zambrano, dirigente nacional del PRD, advirtió que a partir de ahora serán las cámaras de Senadores y Diputados las instancias donde se discuta la agenda política y legislativa del país, “ya no será con el Ejecutivo federal, como en la actualidad.

Quedó atrás la era donde había un legislador (el Presidente) que trabajaba al margen de lo que diputados y senadores decidían en el Congreso de la Unión, haciendo a un lado la división de poderes.

Tampoco será un grupo parlamentario, por más grande que éste sea, el que imponga la agenda de los debates, que pretenda imponer reformas o decisiones regresivas para la vida del país, advirtió.

Recalcó que el Movimiento Progresista no permitirá violaciones a la ley ni al estado de derecho, que no haya sanción para quien rebase los topes de campaña y use recursos de procedencia ilícita, y que convirtiéndose en delincuente electoral no haya sanción y aún quiera que se dé una decisión coligada a la Presidencia de la República.

Propuestas prioritarias

En materia política, los grupos parlamentarios fijaron que el principal quehacer será terminar con el presidencialismo, con un nuevo federalismo que privilegie el equilibrio de poderes, que democratice las relaciones con la ciudadanía, pero sobre todo una nueva forma constitucional “para dotar al Distrito Federal de plena soberanía, con el rediseño, en principio, del artículo 122 para reconocer a la ciudad de México estatus de autonomía.

Humberto Salgado, a nombre del gobernador Ángel Aguirre, clausuró el encuentro, al que calificó como el evento más importante de los últimos tiempos de la izquierda mexicana; salió fortalecido el país, hoy el sol brilló para todos, dijo.