Martes 21 de agosto de 2012, p. 4
La cúpula empresarial del país sostuvo que la violencia de las semanas recientes generó un estado de alarma
en varios estados, y rechazó que la incidencia delictiva haya bajado, pues los secuestros, extorsiones y robos se siguen presentando a niveles muy altos, lo que pone en riesgo la subsistencia de las empresas.
En un mensaje videograbado, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani, exigió al gobierno federal no relegar su responsabilidad de velar por la vida y patrimonio de los mexicanos, y aunque reiteró el respaldo del sector empresarial a la estrategia de la actual administración para combatir al crimen organizado, dijo que es necesario perfeccionar la estrategia por medio de una mayor coordinación de los distintos poderes.
En su mensaje semanal, el dirigente sostuvo que los hechos violentos ocurridos en las semanas recientes no sólo generaron un estado de alarma, sino son un crudo recordatorio de que la delincuencia y la inseguridad pública conforman el expediente abierto más delicado para la sociedad mexicana a corto plazo.
Recordó que los acontecimientos en San Luis Potosí, Zacatecas, Michoacán, Nuevo León, Guanajuato y otras entidades tuvieron lugar antes de un aniversario más del Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad y la marcha Iluminemos México, de 2008, y que esta semana se cumplió un año de la tragedia del Casino Royale, en Monterrey, y dos del hallazgo de los cuerpos de decenas de migrantes asesinados en el noreste del país.
La crisis está vigente y muy lejos de ser prueba superada. No es momento de bajar la guardia, sería irresponsable
, señaló el CCE.
Percepción ciudadana negativa
Gutiérrez Candiani agregó que la percepción de inseguridad en la población y desconfianza en las policías e instancias de procuración de justicia permanecen altas y no existen indicios sólidos de que la incidencia delictiva haya bajado. Por el contrario, indicó, analistas estiman que la violencia creció en los primeros seis meses de este año y es patente una progresiva dispersión geográfica del problema, ya que el número de municipios afectados ha crecido significativamente y no es sólo la frontera norte y algunos estados.
Los secuestros, la extorsión y el robo en casas habitación, negocios y transporte se siguen presentando en niveles muy altos. En gran parte del país la inseguridad se ha consolidado como el factor más problemático para las empresas, llegando a poner en peligro la misma subsistencia de muchas. Ninguna sociedad puede considerar esa dinámica como normal, algo a lo que tengamos que acostumbrarnos.
Gutiérrez Candiani pidió continuidad en el combate al crimen organizado, pero agregó que se debe perfeccionar la estrategia nacional rectificando y complementando lo que sea necesario. Hizo un exhorto para que el Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad tenga proyección transexenal. Calificó de urgente la promulgación de una ley de seguridad nacional que otorgue certidumbre jurídica a la actuación de las fuerzas armadas en el combate a la delincuencia organizada.