Los avances legislativos a favor de los derechos de las mujeres en la última década no han logrado traducirse en una política de Estado clara y será reto de la próxima administración establecerla, señaló Ricardo Bucio, presidente del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).

Tenemos leyes, programas, políticas, presupuesto, instituciones, pero aún no tenemos una política de Estado clara, que pueda ser implementada por cada una de las dependencias, puntualizó en entrevista posterior a su participación en un foro organizado por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres.

Atribuyó lo anterior a que dentro de las instituciones públicas, desde los municipios hasta la Federación, no se asume aún que la legislación es obligatoria. También hay una percepción de machismo en la cultura social que sigue privando en la cultura política.

El funcionario aseveró que ha faltado voluntad política, pues aunque en muchos municipios se han abierto instituciones específicas para la protección de los derechos de las mujeres, sigue sin haber una política transversal en todas las áreas de gobierno.

Agregó que existe la idea de que la política de género no tiene que ver con todos los ámbitos de la vida social, sino con ciertas cuestiones específicas sobre derechos de las mujeres, por lo que uno de los ejes fundamentales de una política de Estado en favor de éstas es su inclusión en todos los espacios de la vida pública y social.