El Grupo Financiero Monex aseguró ayer que respeta el secreto bancario y con ese argumento se excusó de proporcionar información al público sobre los señalamientos del Movimiento Progresista de que el intermediario financiero sirvió de vehículo para transferir, al margen de la ley, recursos a la campaña presidencial del candidato priísta Enrique Peña Nieto.

Monex está obligado por ley a respetar el secreto bancario, lo que impide aclarar públicamente información sin sustento, con la cual lamentablemente se nos ha pretendido vincular, afirmó la empresa en un comunicado.

Monex, que hasta ahora se ha negado a responder sobre las evidencias que relacionan al grupo con la transferencia de fondos, hizo un llamado a los actores interesados (que no identificó) a respetar las investigaciones de las autoridades competentes y a conducirse dentro de los cauces legales.

Según Monex –uno de los principales intermediarios en el mercado de cambios del país y controlador de la empresa Sí Vale, gestora de vales de despensa–, todas las actividades que realiza como grupo cumplen las normas establecidas en el país y son supervisadas por las autoridades financieras. La empresa aseguró tener plena disposición a continuar proporcionando la información que sea requerida por las autoridades como lo ha hecho hasta ahora.