La orquesta sinfónica se remonta a 1548
Martes 28 de agosto de 2012, p. 8
Dresden, 27 de agosto. El director de orquesta alemán Christian Thielemann se hará cargo de la histórica batuta de la Staatskapelle de Dresden, a partir del próximo sábado.
No es la primera vez que Thielemann se encarga de dirigir la orquesta sinfónica de Dresden: ya lo hizo en 2003. De esta manera, su candidatura en otoño de 2009 para sustituir al director de orquesta italiano Fabio Luisi, al cargo de la sinfónica hasta ahora, no fue ninguna sorpresa.
Con el cargo de director jefe de la sinfónica de Dresden cumplo un sueño. Mi mentor, Herbert von Karajan, comparó una vez el sonido de esta orquesta con el esplendor del oro antiguo. ¡No se puede describir mejor con palabras!
, declaró Thielemann entonces.
Es sobre todo por su maestría en el repertorio romántico en combinación con la obra de Richard Wagner lo que convierte a la prestigiosa Kapelle de Dresden en algo tentador para el director de orquesta alemán.
Con esta incorporación a sus filas, la orquesta de la ópera de Dresden Semperoper ha conseguido elevar aún más su valor internacional.
De momento, en 2013 participará en el festival de Semana Santa de Salzburgo, sustituyendo así a la Filarmónica de Berlín. Asimismo se espera mayor afluencia de solicitudes de agencias internacionales para contar con un tour de Thielemann y la Staatskapelle.
Esta nueva etapa también conlleva gran responsabilidad para el prestigioso director de orquesta. Los orígenes de la sinfónica de Dresden se remontan al 22 de septiembre de 1548, cuando fue fundada por el príncipe Moritz de Sajonia.
Considerada como la orquesta más antigua del mundo, cuya existencia no sufrió interrupción alguna desde su creación, la Staatskapelle de Dresden ocupa un lugar preferente en la historia de la música. Grandes compositores, como Richard Strauss, no dudaron en mostrar su gran pasión por esta orquesta.
Thielemann ha elegido para su concierto inaugural una pieza de Hugo Wolfs: Canción para soprano y orquesta, que interpretará con la solista René Fleming, y la Séptima Sinfonía de Anton Bruckner.