El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) –uno de los más transitados de América Latina con 26 millones de usuarios, tan sólo por debajo del de Guarulhos, en Sao Paulo– deja mucho que desear en materia de conectividad a Internet.

De acuerdo con el primer Ranking Aero-social sobre los aeropuertos más conectados, que realizó en la región la agencia de mercadotecnia digital Ressac, que evalúa la infraestructura tecnológica desde el punto de vista de la conexión con los pasajeros, y de cómo las terminales aéreas utilizan las redes sociales y las tecnologías móviles para ofrecer a los usuarios un mejor servicio, el aeropuerto capitalino se sitúa en el lugar 13 de un total de 15 terminales de Estados Unidos, Argentina, Brasil Colombia, Chile, Panamá, Perú, Costa Rica y Uruguay.

Asimismo, el estudio mide la presencia de los aeropuertos en Facebook, Twitter, el canal de videos Youtube y Foursquare (red social que conecta a los usuarios con sus amigos para mantenerse actualizado tanto de lo que ocurra en el mundo como en su círculo de usuario), disponibilidad de sitios web móviles, así como la disponibilidad y velocidad de la conexión Wi-Fi, en la cual la principal terminal mexicana también sale reprobada.

El AICM cuenta con un portal, también dispone de Facebook y Twitter –con un bajo número de seguidores–, pero sus cuentas no están verificadas. Tan sólo en la red social del pájaro azul tiene 2 mil 442 seguidores y sólo ha tuiteado 404 veces. En su mayoría, estas redes sociales son administradas por estudiantes que realizan su servicio social en el aeropuerto.

Consultados al respecto, algunos pasajeros lamentaron el mal servicio de Internet que ofrece el AICM. Neila comentó que llevaba más de seis horas en espera de su vuelo en la Terminal 2 hacia Estados Unidos. Dijo que a pesar de que los maleteros le aseguraron que había conexión gratis, no pudo navegar en la red. Estoy aquí desde las 7 de la mañana, son las 12:30 y únicamente me he conectado una vez y sólo por 5 minutos. La red es lenta o no aparece: no me deja conectar. Estoy frustrada porque necesito comunicarme con mis padres para que me recojan y además quería revisar mi correo y no puedo, señaló molesta.

Pero no fue la única. Al realizar un recorrido por ambas terminales aéreas, es común que la mayoría de los viajeros se trasladen con su computadora personal o teléfonos inteligentes, aunque la mayoría trae su propia red de Internet. No fue así en el caso de Alán Oviedo, quien mientras esperaba su avión intentó consultar en su laptop un informe laboral. La conectividad es muy mala. De hecho estaba tratando de bajar unos archivos pero fue muy difícil, lamentó. Añadió que, contrario a lo de México, otros aeropuertos de América Latina sí cuentan con Internet abierto y de mayor velocidad.

El estudio, que se realizó entre enero y marzo de este año, también indica que la mayoría de los aeropuertos analizados cuentan con redes Wi-Fi; sin embargo la mayoría son pagadas, lo que representa una barrera a la hora de querer utilizar Internet, ya sea con fines informativos, sociales o de comunicación. Lo anterior es un hecho relevante, ya que si el pasajero dispusiera de una conexión gratuita a Internet, podría optar a beneficios y promociones.

“El usuario de hoy –informa el análisis– está muy lejos de parecerse al de hace una década: el perfil del pasajero actual se ha sofisticado de la mano de la tecnología y de la masificación del Internet. Es así como nace este nuevo pasajero, denominado 2.0, que es una persona más conectada con el mundo, especialmente con sus amigos y familia, gracias a la masificación de las plataformas móviles y a los teléfonos inteligentes. Pertenecen a la era de la inmediatez, donde todo está a un par de clics de distancia”.

Las terminales aéreas que ocupan los tres primeros lugares en conectividad, según el estudio, son Ezeiza, en Argentina, con 45 puntos; El Galeao, en Río de Janeiro, Brasil, con 40, y Carrasco Internacional, en Uruguay con 39; ninguna alcanza los 100 puntos que contempla el estudio como mayor puntaje.

La mayoría de los aeropuertos de la región, concluye el estudio, posee un nivel medio de infraestructura tecnológica asociado a la conectividad y un bajo nivel en cuanto al desarrollo de servicios complementarios en las redes sociales, que podrían transformarse en importante platafor- ma de servicios tecnológicos para los pasajeros.