Aún no concluye la auditoría realizada por una empresa de EU
Investigan la filtración
de un contrato para la renta de 5 aeronaves
Sábado 8 de septiembre de 2012, p. 11
El 40 por ciento de los funcionarios de alto nivel de la Dirección General de Servicios Aéreos (DGSA) de la Procuraduría General de la República (PGR), fueron cesados en los últimos 30 días, y en algunos casos sus nombres han sido incluidos en la lista de personas que deberán comparecer ante la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delitos Federales (Siedf) para declarar por actos de corrupción e ineficiencia relacionados con la flota aérea de la institución, revelaron funcionarios de alto nivel del gabinete de seguridad nacional.
La Siedf ha integrado la averiguación previa PGR/UEIDCSPC AJ/SP/3415/2012 por delitos cometidos por servidores públicos.
La auditoría que realiza la empresa estadunidense JDA Aviation Technology Solutions concluirá formalmente el 21 de septiembre, pero sus reportes son la base de la indagatoria en la cual están involucrados ya una docena de jefes de la DGSA, indicaron las fuentes consultadas.
La investigación de la PGR obligó al cese total de operaciones desde el pasado viernes, pero para cumplir con las necesidades de traslado de funcionarios de todos los niveles del gobierno federal y de reos considerados de alta peligrosidad, como fueron los casos de Francisco Arellano Félix, hace una semana, y de Sandra Ávila Beltrán, La reina del Pacífico, el pasado 9 de agosto, la procuradora Marisela Morales Ibáñez ordenó que se rentaran cinco aeronaves.
Sumados a los actos de corrupción que se descubrieron en la DGSA, la contratación de los aviones puso en evidencia que en diversas áreas de la PGR existen revelaciones indebidas de información considerada de seguridad nacional.
Los entrevistados indicaron que “un día después de que se firmó el contrato de renta de aeronaves, en la PGR se recibieron cinco ofrecimientos de servicio de igual número de compañías. Todas ofrecían casi las mismas condiciones que aquella con la que se firmó el convenio.
Pero un pequeño detalle reveló la filtración de información: los grupos no tuvieron acceso al último anexo del contrato
. Ante la situación, la procuradora también ordenó que se investigue a todos los que estuvieron relacionados con esos documentos confidenciales.
La Jornada reveló ayer que la titular de la PGR ordenó la apertura de una investigación, considerada la de mayor importancia interna, debido al descubrimiento de graves irregularidades en el manejo de la flota aérea.
En mayo pasado la PGR contrató una auditoría con JDA Aviation Technology Solutions, integrada por especialistas retirados de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) del gobierno de Estados Unidos.
Entre los auditores enviados a México se encuentra Mel Marengo, especialista en aeronavegabilidad y mantenimiento, quien en 2005 participó en la revisión operativa de la compañía Aerovías del Continente Americano (Avianca), luego de un incidente en el cual se desprendió el tren de aterrizaje de una aeronave que cubría la ruta de la isla de San Andrés a Cali, en enero de ese año.
Las investigaciones de Marengo descubrieron que cuatro aviones Boeing de esa empresa recibían mantenimiento inadecuado, además fueron sancionadas cuatro compañías que operaban en conexión con Avianca y fueron suspendidos 23 pilotos y 29 auxiliares de vuelo.
Como resultado de las primeras investigaciones realizadas por la empresa JDA, Morales Ibáñez ordenó el cese de varios funcionarios: el 15 de agosto tocó el turno al director general de servicios aéreos, capitán Manuel Jesús González Flores, quien de acuerdo con las fuentes consultadas, se niega a realizar la entrega-recepción del área.
Las posiciones que la PGR tiene vacantes son la dirección de administración y finanzas; la subdirección de recursos materiales y servicios generales; la subdirección de seguridad aérea; la dirección general adjunta de operaciones aéreas; la dirección de capacitación técnica; la dirección de mantenimiento mayor y del mantenimiento de aeronaves en campaña; la subdirección regional de la base aérea de Acapulco, la subdirección regional de la base aérea de Cuernavaca y la jefatura del departamento de adquisiciones.