Lunes 10 de septiembre de 2012, p. 7
Recife. La selección brasileña de futbol tendrá ante China, en el amistoso que se disputará el lunes en Recife, la oportunidad de apaciguar el enojo de la afición por su discretísima campaña para el Mundial que organizará en 2014, bajo las riendas del cada vez más rechazado Mano Menezes. La irritada ‘torcida’ no le perdona a Menezes el juego sin clase que exhibe la verdeamarela, las victorias apretadas ante rivales inferiores y por eso piden a gritos su salida, como ocurrió en el amistoso ante Sudáfrica, en el que Brasil venció 1-0 el pasado viernes.