Cultura
Ver día anteriorViernes 14 de septiembre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El compositor Mario Lavista figura entre los integrantes de la delegación mexicana

Ricardo Piglia saluda la participación de Margo Glantz en el festival de literatura de Buenos Aires
 
Periódico La Jornada
Viernes 14 de septiembre de 2012, p. 4

Buenos Aires, 13 de septiembre. Con una apertura protagonizada por el escritor argentino Ricardo Piglia, el cuarto Festival Internacional de Literatura (Filba) en Buenos Aires inauguró anoche una edición que rendirá tributo a las letras de México a lo largo de cinco intensas jornadas.

El autor de Plata quemada ofreció la conferencia Sobre la interpretación desde el escenario del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, en una velada que también evocó al fallecido autor de Los pichiciegos, Rodolfo Fogwill.

Piglia saludó en especial a la mexicana Margo Glantz, una querida amiga, una escritora extraordinaria, y al colombiano Fernando Vallejo. Es una alegría saber que están en Buenos Aires, apuntó hacia el auditorio, donde se encontraban los dos invitados estelares del Filba.

Una de las secciones del encuentro es Concordancias: música y literatura, que explorará los cruces entre ambas disciplinas.

Una partitura es simplemente un indicio de música potencial, citó Piglia, para luego continuar: “Me pareció que esa idea de la música potencial estaba muy relacionada con las poéticas actuales de la narración, que tienden a ver siempre la lectura como la puesta en acción de un relato potencial.

La lectura actualizaría esa potencialidad, haría aparecer ese relato. Para interpretar una narración en realidad hay que volver a contarla, explicó.

La traducción, consideró, es un ejemplo para pensar esta situación. Virginia Woolf recordaba que sus amigos escritores decían que la mejor novela que se había escrito era La guerra y la paz, de Tolstoi, pero todos la habían leído en traducción, porque no sabían ruso.

Ese juicio parece querer decir que la calidad de una novela no depende exclusivamente del estilo del original, como si en la narración hubiera algo más allá de la lengua, que nos diera siempre una suerte de contenido que va más allá de la pura eficacia lingüística. Esto quiere decir en un sentido que la novela puede soportar las traducciones, indicó.

Es como si la novela hubiera nacido ligada a la traducción y a la posibilidad de expandirse en lenguas distintas, apuntó Piglia. La novela sería la primera forma narrativa que surge ligada a la lectura y a la traducción.

Diez autores mexicanos arribaron por estos días en la capital argentina, como Glantz y la joven Valeria Luiselli, quienes animarán la sección ¡Viva México!

La delegación está integrada, además, por Fabio Morábito –nacido en Egipto y residente en México–, Álvaro Enrigue, Leonardo Da Jandra, Guillermo Fadanelli, Julián Herbert, la argentina radicada en México Sandra Lorenzano, el compositor Mario Lavista y el editor y director de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca, Guillermo Quijas.