Martes 18 de septiembre de 2012, p. 31
En el camino de regreso al punto de partida iniciado el primero de junio de 2012, un mes antes de la elección presidencial, el peso ha recuperado 156 centavos en su paridad con el dólar hasta ayer, lo que representa una apreciación de 10.9 por ciento en los últimos tres meses y medio.
Pero aún le faltan 180 centavos para llegar a la paridad que tuvo el 30 de noviembre de 2006, la víspera del inicio del segundo gobierno del PAN, el cual tampoco pudo evitar el estigma devaluatorio que ha perseguido a los gobiernos del PRI y del PAN en ocho sexenios transcurridos entre 1970 y 2012.
En los últimos 42 años no ha habido un solo gobierno en el que el peso no resultara vapuleado. Todo empezó con el de Luis Echeverría Álvarez, en el que la moneda mexicana se devaluó 76 por ciento frente al dólar, después de haber mantenido una paridad fija de 12.50 en los 22 años precedentes al término de este gobierno en 1976.
Luego la devaluación. De 1977 a 1982, en el sexenio presidido por José López Portillo, la devaluación fue de 218.2 por ciento. En el de Miguel de la Madrid Hurtado, de 1983 a 1988, fue el apocalipsis: el peso se devaluó en 3 mil 178.6 por ciento.
Vino el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, en el cual la moneda nacional se depreció 49.8 por ciento. A éste le sucedió en la Presidencia de la República Ernesto Zedillo Ponce de León, y un repunte de 173.8 por ciento en el proceso devaluatorio del peso.
Peso vapuleado
Llegó la alternancia con el primer gobierno del PAN, presidido por Vicente Fox Quesada, pero prosiguió la devaluación. De 2001 a 2006, la moneda mexicana se hundió 16.8 por ciento. En el segundo gobierno panista, de 2007 a la fecha el peso mantiene una trayectoria a la baja con depreciación de 15.92 por ciento.
Según el Banco de México, durante los dos gobiernos del PAN el peso acumula devaluación de 35.3 por ciento. El 30 de noviembre de 2000 se pagaban 9.45 pesos por cada dólar en las masivas transacciones interbancarias. El 17 de septiembre de 2012 la paridad entre ambas monedas cerró en 12.7859 pesos.
En este segundo y último gobierno del PAN, paradójicamente el tipo de cambio en México llegó a su punto más bajo, en 9.8745 el 4 de agosto de ese año, y tan sólo ocho meses después, en plena recesión, alcanzó su máxima devaluación de 36.2 por ciento, con un registro de 15.4900 el 9 de marzo de 2009.