Lento proceso de recuperación y desaceleración de la economía de China, entre las causas
Incrementará en 127 mil millones de dólares, casi el doble de lo previsto, la adquisición de activos
Jueves 20 de septiembre de 2012, p. 29
Tokio, 19 de septiembre. El Banco de Japón (BJ) decidió este miércoles ampliar sus compras de bonos y obligaciones para inyectar más liquidez en el sistema financiero y estimular la economía –la tercera del planeta–, lastrada por la desaceleración mundial.
El banco relajó su política monetaria reforzando su programa de compra de activos ante las perspectivas de una ralentización en el proceso de recuperación de corto plazo y la prolongada desaceleración del crecimiento de China.
Con ello, el Banco de Japón se convirtió en el más reciente banco central en lanzar nuevos estímulos para impulsar su economía, tras las decisiones del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) en las últimas dos últimas semanas.
El banco central japonés incrementó las compras de activos en 10 billones de yenes (127 mil millones de dólares), casi el doble de lo que algunos habían previsto, hasta finales de 2013, seis meses más de lo previsto. También mantuvo, como estaba previsto, su principal tasa de interés entre 0.0 y 0.1 por ciento. Pero la acción fue considerada no tan fuerte como la de otros bancos centrales.
El banco espera alentar una caída de los tipos de interés a largo plazo sobre el mercado y facilitar los préstamos bancarios para fomentar el consumo, la inversión y por tanto la actividad general.
La Reserva Federal (el banco central estadunidense) lanzó la semana pasada un nuevo programa de estímulo sin límites fijos, en el que se compromete a comprar 40 mil millones de dólares en deuda hipotecaria por mes hasta que mejore sustancialmente el panorama para el empleo en Estados Unidos, que se encuentra actualmente en 8.1 por ciento. Por su parte, el BCE planea comprar sumas ilimitadas de bonos de gobiernos de los países más endeudados de la zona euro.
Con esto, el monto total consagrado a la compra de activos e inyecciones al circuito interbancario asciende a 80 billones de yenes (800 mil millones de euros; un billón de dólares), para facilitar las condiciones de circulación del dinero y dinamizar la actividad.
Las economías extranjeras se desaceleran de forma más marcada
, subrayó el gobernador del banco japonés, Masaaki Shirakawa, lo que es una mala noticia para la tercera economía mundial, cuyo crecimiento depende en buena parte de las exportaciones.
Es cierto que se ha notado cierta distensión en los mercados financieros sobre los temores por el problema de endeudamiento europeo
, tras el anuncio del BCE de que comprará ilimitadamente deuda de corto y medio plazo de los países de la eurozona en dificultades. Pero el gobernador subraya que en la economía mundial siguen pesando grandes incertidumbres
.
En el frente japonés señaló que la recuperación de la economía, bastante fuerte en el primer semestre, marca ahora una pausa
debido al menor dinamismo del consumo y de la inversión.
Shirakawa también alertó del estancamiento de los precios en el archipiélago, que oficialmente lleva en deflación más de tres años. Según el gobernador, esta coyuntura justifica recurrir a medidas no convencionales que permitirán suavizar las condiciones de circulación de dinero para las empresas y los hogares.
El gobierno japonés saludó estos anuncios, al igual que la bolsa de Tokio, donde el índice Nikkei subió 1.19 por ciento, su mayor nivel desde principios de mayo. Los demás mercados bursátiles también terminaron en terreno positivo, alentados también por un dato favorable sobre el sector de la vivienda en Estados Unidos. En la bolsa de Nueva York el promedio industrial Dow Jones subió 0.10 por ciento, a 13 mil 577.65 unidades; el Nasdaq avanzó 0.15 por ciento y el índice ampliado Standard & Poor’s 500 0.12 por ciento.
La Bolsa Mexicana de Valores siguió la tendencia y subió a un máximo de un mes; el principal índice bursátil local, el IPC, ganó 0.86 por ciento a 40 mil 941.31 puntos, nivel que no alcanzaba desde el 8 de agosto. Las bolsas europeas y las latinoamericanas, con excepción de la de Sao Paolo, también terminaron con leves ganancias.