Cuñado del ex presidente Luis Echeverría, estuvo preso 23 años
Jueves 20 de septiembre de 2012, p. 13
Rubén Zuno Arce, cuñado del ex presidente Luis Echeverría Álvarez, falleció en una prisión de Estados Unidos tras permanecer recluido durante 23 años, acusado de haber participado en el asesinato del agente antidrogas Enrique Camarena Salazar, en el estado de Jalisco, en 1985.
Fuentes cercanas a la familia de Echeverría Álvarez, quien gobernó de 1970 a 1976, confirmaron el deceso de Zuno Arce. Este fue hijo de José Zuno, gobernador de Jalisco de 1923 a 1926, y hermano de María Esther, quien fue esposa del ex presidente Luis Echeverría.
Zuno Arce, segundo de cuatro hijos, se graduó en Economía, fue diputado local en Jalisco y formó parte de la mesa directiva de la Liga de Comunidades Agrarias en esa entidad. Antes de ser acusado de vínculos con el narcotráfico por el gobierno de Estados Unidos, en 1978 se le acusó de haber participado en el asesinato de un agente de la Policía Judicial Federal, pero fue exonerado.
En 1989 fue detenido en Texas por presuntos nexos con el narcotráfico, específicamente con los capos Ernesto Fonseca Carrillo, Félix Gallardo y Rafael Caro Quintero, entonces líderes del cártel de Jalisco.
Ese mismo año, autoridades de Estados Unidos lo declararon culpable, con testimonios comprados
, obtenidos de policías mexicanos que lo señalaron como uno de los participantes en el homicidio de Camarena Salazar, quien fue privado de su libertad el 7 de febrero de 1985 y cuyos restos fueron localizados el 5 de marzo en un pueblo conocido como La Angostura, en Michoacán.
Las fuentes consultadas señalaron que Zuno Arce falleció el martes en una prisión de Florida, Estados Unidos, a consecuencia de un cáncer.
Otro de los presuntos involucrados en la muerte del agente estadunidense fue Humberto Álvarez Machaín, secuestrado por agentes de la DEA en Jalisco y trasladado ilegalmente a ese país para ser procesado, pero un juez le decretó la libertad al determinar que su detención había sido realizada ilegalmente y las acusaciones carecían de sustento.