La versión se fortalece con declaración de agentes de la CIA: fuentes de ambos países
Viernes 28 de septiembre de 2012, p. 12
La hipótesis que indaga el gobierno de Estados Unidos sobre el ataque que sufrió una camioneta de su embajada en México el pasado 24 de agosto en Tres Marías refiere que los agresores pertenecen al cártel de los hermanos Beltrán Leyva, y el propósito era ejecutar a los dos integrantes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) que viajaban en el vehículo, revelaron fuentes nacionales y de la sede diplomática.
Esa línea de investigación se ha fortalecido tras la declaración ante autoridades del país vecino de Chess Hoods Garner y Stan Dove Boss, agentes de la CIA que viajaban –junto con un efectivo de la Armada de México– en la camioneta el día de la agresión, añadieron los informantes, que pidieron no revelar sus nombres.
La embajada estadunidense, que desde un inicio informó que lo ocurrido el 24 de agosto fue una emboscada
, cuenta con indicios de que existía el propósito de privar de la vida a los agentes de la CIA, aunque aún no están claros los motivos para hacerlo.
Fuentes castrenses mexicanas revelaron a La Jornada que la colaboración entre los agentes atacados y la Secretaría de Marina tiene por lo menos tres años y medio, por lo cual no se descarta que la intención de emboscarlos en Tres Marías hubiera derivado de una venganza.
La colaboración entre agencias de Estados Unidos y la Armada han permitido, entre otros operativos, que se realizara el del 16 de diciembre de 2009, cuando Arturo Beltrán Leyva –El jefe de jefes, líder del cártel de los Beltrán Leyva– murió tras un enfrentamiento con marinos en Cuernavaca, Morelos.
A decir de fuentes judiciales consultadas, el secretario de Marina, almirante Francisco Mariano Saynez, ha fortalecido las relaciones de colaboración con las agencias de inteligencia estadunidense. En este sexenio, paradójicamente, se ha reducido la confianza de las autoridades de aquel país en la Secretaría de la Defensa Nacional.
Dos días después de la agresión en Tres Marías, autoridades de Washington ofrecieron convertir en testigos protegidos del gobierno estadunidense a los 12 agentes de la Policía Federal (PF) que están arraigados y bajo investigación, informaron abogados de los efectivos.
Hace dos días, Marisela Morales Ibáñez, titular de la Procuraduría General de la República (PGR), informó que la dependencia considera necesario solicitar la ampliación del arraigo de los 12 elementos de la PF.
Entrevistada al término de la inauguración de un curso de prevención y combate a las drogas sintéticas, señaló que la PGR está cerca de concluir el caso.
De acuerdo con información que proporcionaron los abogados de los 12 elementos de la PF vinculados al caso Tres Marías, cuando éstos fueron presentados en las instalaciones de la PGR los interrogaron funcionarios de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés).
El interrogatorio fue autorizado por Marisela Morales y se refirió a la presunta participación de personas vestidas de civil que agredieron con armas de fuego desde diversos vehículos a la camioneta diplomática.