Empieza mañana jaloneo en San Lázaro por el reparto; las principales, para tricolor, PAN y PRD
El PVEM presiona desde las televisoras para conservar la de radio y tv; también la busca el sol azteca
Domingo 7 de octubre de 2012, p. 7
La negociación por las presidencias de las 55 comisiones ordinarias en la Cámara de Diputados determinará los equilibrios políticos que habrán de persistir en los próximos tres años frente al gobierno de Enrique Peña Nieto.
En el trienio por venir, la administración federal deberá consolidar las reformas que den sustento al proyecto priísta y, por tanto, la fracción parlamentaria de ese partido busca las mejores condiciones en el reparto de los grupos de trabajo con mayor peso en el Poder Legislativo.
Cada una de las bancadas que confluyen en San Lázaro (PRI, PAN, PRD, PT, Movimiento Ciudadano, Panal y Verde Ecologista) han intercambiado sus prioridades para ocupar dichas posiciones.
Una vez que el Senado ratificó la minuta de reforma al artículo 89 del Reglamento Interior de la Cámara de Diputados, cuyo propósito es incrementar de 44 a 51 el número de comisiones, deberá ser enviada de forma oficial a la mesa directiva de San Lázaro –cuando muy tarde el martes próximo–, que encabeza el priísta Jesús Murillo Karam, y el plazo para negociar, persuadir o imponer será de una semana.
De esa forma, el criterio que prevalecerá para conceder las comisiones será el de la proporcionalidad. Con ello, el PRI, con 214 diputados; el PAN, 114, y el PRD con 104 se dividirán las presidencias en un rango cercano a 20, 12 y 11, respectivamente. El resto se repartirá entre los cuatro partidos con representación más reducida.
Se espera que a partir de mañana, los coordinadores de esos partidos: Manlio Fabio Beltrones, Luis Alberto Villarreal y Silvano Aureoles, respectivamente, junto a sus vicecoordinadores, se concentren en dividirse los grupos de trabajo.
Hasta ahora han cuidado no revelar los nombres y perfiles de sus candidatos para evitar que en sus respectivas bancadas se ventilen golpeteos o zancadillas.
Para el PRI esta negociación es de importancia sustantiva porque pretende, como elemento primordial, mantener la presidencia de la Comisión de Presupuesto; incluso ya se habla de que podría encabezarla Azucena Olivares, oriunda del estado de México, con el propósito de garantizar a Enrique Peña Nieto que el gasto para el primer año de su gobierno sea acorde con los programas prometidos durante su campaña presidencial.
En esa tesitura, el PRI también conservaría las comisiones de Agricultura, Comunicaciones, Educación, Trabajo, Justicia y Seguridad, y agregaría las de Energía y Gobernación, que hasta ahora eran presididas por panistas (desde que ese partido ocupó el poder presidencial hace 12 años).
En medio del PRI y el resto de los partidos que pretenden ocupar comisiones de relevancia se encuentra el Partido Verde (PVEM), que ya empezó a presionar desde las televisoras (Televisa y Tv Azteca) y la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión para conservar la de Radio y Televisión.
Telebancada
La telebancada (conocida así porque los verdes han pasado a representar los intereses del duopolio televisivo, y como ariete de ese poder ha cedido espacios a personajes que son empleados de esa industria) se enfrentará al interés que ha manifestado el PRD de encabezar esa comisión, porque tiene en sus filas a una diputada especialista en esa compleja temática. El sol azteca exigirá frente a sus pares que en ese caso se aplique el criterio que habrá de imperar en la negociación, porque tiene cuatro veces más diputados que los verdes.
En ese caso, la negociación de la Comisión de Radio y Televisión se enredará, porque el PRI, que recurrirá a la proporcionalidad para jalar a su cancha las comisiones que más convengan a Peña Nieto, se verá en la disyuntiva de dejar solo a su apéndice (el PVEM) ante el reclamo del PRD para que haya equidad y no agandalle.
En el resto de las comisiones del ramo económico que restaría por dividir –aparte de la de Presupuesto–, la de Hacienda y Crédito Público permanecerá en manos del PAN, y la de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación será presidida por el PRD.
Un punto donde se espera un encontronazo es en la pretensión del PRI de presidir las comisiones de Gobernación y Energía, que hasta la pasada legislatura formaron parte del catalogo de comisiones controladas por el PAN.