El cierre del primer día de actividades del Festival Corona Capital resultó un cúmulo variado de sonidos que fueron de lo electrónico al glam, del brit pop al indie rock, del garage a punk y hasta del folk al reggae, en el que Suede marcó una abismal diferencia musical respecto de la mayoría de las propuestas con un sonido que los calificativos impecable, pulcro, preciso y elegante serían injustos. Cargado de su variado arsenal sonoro mostró su vigencia e importancia en la escena con canciones como The Beautiful Ones, Trash, Animal Nitrate y So Young. Mención a aparte merece su líder Brett Anderson, quien hizo las delicias por todo el escenario de principio a fin, manejando a su antojo al público, resguardado por la guitarra omnipresente de Bernard Butler, el incesante bajeo de Matt Osman y la hueca batería de Simon Gilbert. Fue un verdadero deleite sonoro/visual.

Otros que llegaron a voltear de cabeza al público fueron The Hives, que se esforzaron por comunicarse en español con el auditorio y fincaron su concierto en los temas de su nuevo disco Go Right Ahead y canciones como Come on!, Take Back The Toys y I Want More con lo que el escenario Corona dio el cierre de actividades.

Mientas tanto en el Capital, segundo escenario en importancia, Franz Ferdinand con una plancha repleta de seguidores, puso a brincotear al público hasta conseguir una hermosa locura desenfrenada con temas como Take Me Out (la más ponedora del grupo), Walk Away y Dark of the Matinée, con las que deleitó a los presentes a lo largo de hora y 20 minutos que duró su actuación.

La clausura de actividades del escenario Bizco Club corrió a cargo de las sorprendentes Death in Vegas, la rica propuesta de Sleigh Bells, la colorida presentación de Mike Snow, pero sin lugar a dudas Basement Jaxx se llevó la velada cuando ya pasada la media noche y pese a lo arduo de la jornada los jóvenes se movieron alegremente como si fuera de las primera bandas, agradeciendo la programación de este grupo largamente esperado.

Lo mejor de la noche y del día fue el espíritu de las hordas de jóvenes que se paseaban de un escenario a otro en santa comunión y luciendo su ropa, convirtiendo el Autódromo Hermanos Rodríguez en una pasarela de 59 mil 790 (según cifras oficiales) modelos; las vestimentas de los asistentes por momentos alinearon el tiempo y espacio y trasladaron la sique a festivales pasados... Los jóvenes tuvieron como mejor gesto/manifestación de amor para sus grupos que el baile y el coro para acompañarlos.

Lo mejor de la segunda jornada del Festival Corona Capital llegó con The Vaccines, que puso a girar a una nutrida cantidad de asistentes este domingo en el Autódromo Hermanos Rodríguez, con sus amplios matices musicales anacrónicos, sacados de sus instrumentos muy bien ejecutados.

Antes, sobre el este mismo escenario Corona, ya habían desfilado Bam Bam, Tribes, Here We Go Magic y The Big Pink, que probaron, con diferentes intensidades su calidad, en un ambiente mucho más emotivo que el de la primera jornada, pues había mucho más gente y las propuestas parece que gustaron más.

Por otro lado, en el escenario Corona Light, The Raveonettes trasladó al respetable hacia un encanto musical hasta llevarlo a una especie de trance gozoso. Calentaron el escenario Los Impostors, L.A. y St. Lucía, que presentaron propuestas muy decentes. Black Lips sonó impresionantemente mal, una mala ecualización que hizo ininteligible lo que tocaron.

Los que no dejaron duda de su calidad musical fueron Alabama Shakes, que pusieron a bailar con su blues/rock sureño a unos 40 jóvenes que asaltaron el escenario Capital. Florence salió a compartir con ellos.

Por este escenario ya habían pasado Ventilader, que merecía un horario mejor, pues tuvo un público flojo que no fue proporcionalmente bueno respecto de su música. Les siguieron I Can Chase Dragons!, que dejaron un buen sabor de boca, pero lo mejor de ellos está por venir. Francia Valenzuela fue otra que desmereció en horario y tiempo, pues la expectativa que causó superó por mucho la media hora de su actuación.

Mientras en el escenario Bizco Club estuvieron las propuestas más aletargadas. Se presentaron Josef Bamba, Memory Man, Rebolledo, Los raías, Shabazz Palaces, Araabmuzik y Whomadewho, poco público con un bajón de ánimo respecto de las otras bandas en otros escenarios.

Antes del cierre de esta edición faltaba el corte grueso del final del festival: New Orden, The Black Keys, Florence + The Machine, DJ Shadow y Snow Patrol.