Destruyen campamento de trabajadores en paro
violento desalojoen La Platosa
Retirar golpeadores, exige el sindicato minero
Jueves 25 de octubre de 2012, p. 21
La madrugada de ayer, cerca de 300 golpeadores
desalojaron con violencia el plantón y campamento instalado afuera de la mina La Platosa, de Bermejillo, Durango –de la empresa Excellon Resources–, denunciaron el sindicato nacional minero, que encabeza Napoleón Gómez Urrutia, y la organización Proyecto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ProDESC),
Dijeron que con dicho plantón, trabajadores y ejidatarios protestaban de manera pacífica porque el consorcio de capital canadiense no quiere reconocerles su derecho de libertad sindical ni cumplir a los campesinos el convenio de arrendamiento firmado en 2008.
Los trabajadores se habían instalado a la entrada de la unidad para impedir el movimiento de minerales de La Platosa y demandar diálogo con la empresa. Sin embargo –afirman–, gente relacionada con el opositor minero Carlos Pavón, con violencia desalojó a los manifestantes.
Los trabajadores exigen que la empresa reconozca su libertad para adherirse al sindicato nacional de mineros y que cumpla a los ejidatarios el convenio de arrendamiento firmado por ambas partes, mismo que con altanería y soberbia la empresa se ha negado a cumplir
.
Sin embargo –afirman–, ayer fueron atacados por personas que llegaron en cinco autobuses e invadieron los predios que ocupaban mineros de la sección 309 del sindicato minero para continuar su movimiento de resistencia.
Ambas organizaciones coincidieron en que la gente que quemó jacales y arrasó con maquinaria el campamento fue pagada por Pavón, David Navarro y Gustavo Barrios, del Sindicato Minero Gómez Sada
, y eran coordinados por Robert Moore, directivo de Excellon (...) muchos de ellos iban con aliento alcohólico y tenían como orden desalojar a los manifestantes
. Añadieron que la operación fue financiada por Grupo Peñoles, de Alberto Bailleres González
.
El paro en La Platosa empezó el pasado 5 de julio, debido a que los dueños se niegan a reconocerles la representación del sindicato nacional minero. No obstante –señalan–, la empresa subcontrató trabajadores, llevó explosivos al yacimiento y empezó a sacar minerales, por lo que los mineros en paro y los ejidatarios decidieron poner el campamento que ayer les destruyeron.
El sindicato nacional minero denuncia esta nueva agresión
de la compañía Excellon Resources y conmina a los gobiernos federal, estatal de Durango y municipal de Bermejillo a que retiren de inmediato la turba de golpeadores y obliguen a la empresa a negociar la solución del conflicto. También responsabiliza a la empresa y las autoridades estatales de que puedieran darse otros hechos de violencia o pérdidas de vidas.